Dokumentuaren akzioak
Zalacaín el aventurero baila en el Arriaga
La novela de Pío Baroja adaptada por Harkaitz Cano se convierte en un espectáculo con seis compañías de danza
Urbeltz crea una composición dramática, un teatro-danza que cuenta una historia de principio a fin. Y no cualquier historia, sino la de uno de los héroes de la literatura vasca, ese 'Zalacaín el aventurero' que imaginó Pío Baroja, que también aparece en el montaje encarnado por Ander Lipus.
'Martin Zalakain' es una producción que, dice Lipus, solo es posible desde la pasión que le ponen los 'amateurs', algo «imposible» de realizar en el terreno profesional, al menos aquí y ahora. Se dan cita varios grupos de danzas, músicos y hasta algún escritor. El escenario estará muy concurrido, hay 80 personas trabajando en el espectáculo. Son seis grupos de danza -Argia, de San Sebastián; Kezka, de Eibar; Haritz, de Elgoibar; Duguna, de Pamplona; Maritzuli, de Biarritz, y Elai-Alai, de Portugalete-; Lipus actuando como Don Pío; los creadores de la 'banda sonora' Marian Arregi (acordeón) y Mikel Urbeltz (violín) acompañados por txistus, dulzainas y cuerdas...
Ritmos mexicanos
El escritor Harkaitz Cano ha sido el responsable de condensar las más de doscientas páginas de la novela de Baroja en «cuatro o cinco folios», un ejercicio que por momentos le parecía «sacrilegio». Una vez que tuvieron el «guion», los Urbeltz empezaron a ponerle los ritmos y las coreografías «sobre la mesa de una taberna». Esa imagen casa muy bien con la de la historia, que Cano dice que se asemeja a «las del 'far west'» porque tiene «peleas de taberna, cárceles, huidas, saltos...». Es lo que ocurre cuando el protagonista vive en la época de las guerras carlistas. Como muchos de quienes participaron en ellas terminaron marchando a América, los músicos incluyen en el repertorio habaneras y ritmos mexicanos.
'Martin Zalakain' tiene «toda la carga romántica y dramática de un héroe tradicional». Urbeltz tenía claro que él tenía que ser el protagonista de este paso adelante de sus producciones de danza tradicional vasca. Entre las opciones que espera que puedan subir algún día a los escenarios menciona también al Ramuntcho de Pierre Loti, «que podría hacerse con una música de Ravel, de ballet romántico», y al también barojiano Jaun de Alzate.
Dokumentuaren akzioak