Una entregada euskaltzale, imprescindible para Bizkaia

Mari Tere Zugaza-Artaza Linaza maestra de Maiztegi e impulsora de la cultura en Iurreta

Ya lo dijo ayer alguien con el humor que a ella le hacía vivir: "Disfrutaba tanto, se comía la vida hasta que se atragantaba, que, mira tú, le ha debido sentar mal". Su marido Jose Javier Abasolo Tiliño y el hijo de ambos, Beñat, sonrieron. Precisamente ese fue el sentimiento que se pretendió para el acto: equilibrar el inevitable superlativo dolor por su pérdida con despedirle como le hubiera gustado a ella, que así fue.

Hubo dantzaris, sonó el Aita San Migel Iurretako, bertsolaris, lecturas a su querida persona como un texto de su convecino Joseba Sarrionandia o de su amiga Mariapi Mintegia y su sentido "Aupa, potxola!"; aplausos, mejor dicho, centenares de calurosos aplausos, lágrimas, el "Gora Mari Tere!, Gora San Migelak", del bertsolari y sobrino de la educadora Abarkas; canciones, recuerdos para Rafa -su hermano fallecido el pasado 11 de abril-, trikitixa…

Todos quienes se acercaron al micrófono le vistieron con un traje de adjetivos hecho a su medida: "radiante, jovial, cantarina, animada, siempre dispuesta"… Yendo más al grano: Maestra incansable con trayectoria en EMK-Zutik, sindicalista de STEE-EILAS, comprometida con Iurreta, referente en la educación, luchadora por los derechos de las mujeres y "defensora de los indefensos, por ello fue maestra", teorizaron.

Su entregado paso por la vida y por la de tantos y tantos corazones anexos fue tal que llegaron ayer a salir a la plaza con sus trikitixas juntos Joseba Tapia, Kepa Junkera, Motriku o Zabaleta. Tan importantes como ellos eran los comentarios que se sucedían entre el público. Algunos en voz de Jon Irazabal, Mikel Aiartzaguena o Itziar Irazabal. Jon le definió como "la tuerta que mejor visión de análisis tenía de la política del movimiento vasco". Recordó que ayer, a la de Oromiño se le dio sepultura por la mañana vestida con su pamela que "tanto le gustaba" y como decía ella "en su chalé de la calle principal de la villa, en referencia al cementerio iurretarra, junto a sus padres".

todo lo que valía Aiartzaguena lamentó emocionado tras abrazarse con Tiliño y Beñat, al final del acto, que "no hayamos sabido reconocer en vida todo lo que ha hecho y lo que Mari Tere valía", subrayó. Itziar ensalzó el trabajo hecho por la andereño por el euskera en la enseñanza cuando los modelos aún no estaban claros. Segundos más tarde por el micrófono un residente extranjero de Iurreta agradeció en nombre de todos los llegados a la anteiglesia la labor que desempeñó en este aspecto con los escolares. "Sin saber euskera o castellano, conseguía transmitirles seguridad", amplificó. Entre todos los que fueron a dar el pésame a la familia, Jon Mallora y Marisa Soldevilla concluyeron que "hoy aquí solo falta ella, se hace extraño no verle".

Y lo cierto es que no faltó nadie para reconocer su continua labor en silencio, "los años de la resistencia", frases como "quien te ha conocido, nunca te olvidará" o las expresadas por un miembro de Txomin Barullo: "Todos los momentos vividos contigo me llenan de alegría, pero el corazón se ha poblado hoy con una bandada de pájaros negros" e hizo un llamamiento a querer compartir los valores de Zugaza-Artaza.

Un componente de Aiko dantza taldea redondeó la jornada al hacer entrega de un disco publicado esta misma semana a la familia en el que se incluye una habanera titulada Mari Tere en la que también se cita a su inseparable Tiliño, otro tótem euskaltzale irrepetible. A ellos, los compañeros de todos los medios de comunicación les agradecemos su complicidad constante. Mari Tere era la dedicación hecha persona, contagiaba ganas de ver un teatro amateur, sumarse a un baile en fiestas de Garai, de aplaudir en Plateruena kafe antzokia de Durango... Todo ello porque la cultura, la educación o la palabra son derechos que nos enriquecen y nos unen en una nación de tantas diferencias. Somos, Mari Tere, tan vascos que en muchas ocasiones llegamos tarde a decir cosas como cuánto te admiramos. Hoy no, porque lo seguimos haciendo.

Trikitilaris de renombre internacional se acercaron a Iurreta a rendir un homenaje de despedida a Mari Tere Zugaza-Artaza. (Foto: iban gorriti)