Portugalete vuelve a vibrar con el Festival Internacional de Folklore

En la música no hay fronteras que separen a los países. Por muy distintos que sean los idiomas, la cultura o los modos de vida en general, la música y el baile son el lenguaje universal de la humanidad. Y una muestra de ello es el Festival Internacional de Folklore, que vuelve un año más a Portugalete para celebrar su 49 edición. Cada verano la villa se convierte en un «referente del folklore» con un evento que siempre tiene una «gran acogida por parte de los portugalujos y de otras ciudades que se acercan para disfrutar de este estallido de color, música y cultura con el que nuestra villa se convierte en un ejemplo de multiculturalidad», recalca Marijose Blanco, alcaldesa de la localidad jarrillera.

En esta ocasión se contará con la presencia de cuatro continentes y demostrarán su riqueza cultural grupos de Kenia, Hungría, Kazajistán, Brasil, Bolivia y, por supuesto, Euskadi. Durante la presentación del festival, que ha tenido lugar este viernes en el Hotel de Portugalete junto a la presidenta de Elai Alai –la sociedad que organiza el evento–, Iratxe Santacoloma, y el viceconsejero de Cultura del Gobierno vasco, Andoni Iturbe, se ha dado paso a una actuación musical por parte de NAZ, el conjunto folklórico nacional de Kazajistán. Gracias a unos instrumentos rústicos y de cierta finura, sus miembros han interpretado con danza y canto una combinación de armonía, la fuerza viril de los jinetes que atravesaron Asia y Europa, y la poesía inspirada en los sentimientos amorosos.

A ellos se sumarán el grupo de danza Ilosvai Selymes Péter, de Hungría, que harán una puesta en escena fiel a la cultura tradicional de lo que denominan las tierras altas, su seña de identidad; y Afrikan Tumbas, de Kenia, cuyas danzas representan, de forma narrativa, distintas historias de matrimonios, nacimientos, muerte, cosechas, guerras o festivales religiosos. Desde el continente americano llega Manuel Acoste, el ballet folklórico de Bolivia, que dejarán al público boquiabierto con su destreza en el baile, acompañado de máscaras y vestimentas peculiares; y el grupo Bale da cultura negra do recife, desde Brasil, que sorprenderá con su mezcla de danza, música y color. También participará, como es tradición, Elai Alai, haciendo gala de los bailes vascos.

El festival arrancará el próximo lunes 22, en el paseo de La Canilla, con las actuaciones de Kenia y Hungría. El martes será el turno de Kazajistán y Brasil, mientras que el miércoles danzarán Bolivia y Euskadi. El jueves todos los grupos pasarán por el escenario y, posteriormente, el domingo, tendrá lugar Mundo Dantzak, donde los representantes de todas las naciones compartirán su riqueza cultural a través de la música y la danza en la calle Carlos VII. Todas las actuaciones serán a partir de las 21.30 horas.

La edición de este año tendrá un toque solidario. Por un lado, Elai Alai colabora con el proyecto Pon Música en tu Vida, en el que madres de niños con necesidades especiales venden llaveros hechos a mano para costear las terapias musicales de sus pequeños. Además, desde el punto de vista sostenible, se seguirá el ejemplo de los colegios de Portugalete y la comida sobrante durante el festival se llevará a la máquina expendedora de Los Llanos para que «cualquiera que la necesite pueda hacer uso de ella», apunta Santacoloma.