Pamplona celebra San Blas con mercadillo, procesión y 'soka-dantza'

Este año se colocarán 21 puestos en lugar de 44. Por la tarde, a las 19.30 h., habrá un espectáculo de 'soka-dantza'

Este reducido número de puestos se debe, según el consistorio, al incremento del tamaño de los mismos, pues pasan de dos a tres metros, y para "poner un poco de orden", ha comentado Angelines Catalá, una de las vendedoras, quien ha valorado que "estamos más amplios, la gente puede pasear mejor".

Cada puesto ha sido adjudicado en subasta "a viva voz", con precios que van desde 100 euros para los de la calle San Miguel hasta los 560 euros de tres puestos en la puerta de la Iglesia de San Nicolás. "No nos ha parecido bien a nosotros desde el punto de vista de que, cuando tú vas a una subasta para un puesto de venta ambulante, te hace falta ser autónomo sin licencia fiscal, y en este caso no la han pedido, con lo cual podía entrar cualquiera que no se dedicase al mundo de la venta", ha señalado Catalá, que tiene su puesto en la plaza de san Nicolás.

Es una apuesta algo arriesgada, pues, como Catalá ha dicho a Efe, "no se sabe" cuánto se logrará vender en un día en el que la afluencia de gente a la zona depende mucho del clima. En ese sentido, Jose Manuel Urrutia, de pastas Urrutia de Ujué, que tiene varios puestos en el mercado, ha afirmado que "San Blas depende mucho del tiempo y del día que toque. La crisis, para San Blas no afecta mucho". Esto se debe, a su juicio, a que San Blas es una de las festividades y mercadillos "de los más tradicionales que se conservan en sus costumbres y sus productos", salvo que "ahora va más higiénicamente protegido todo, pero el producto es parecido".

Este año continúa la prohibición de venta de pan, incluido el "pan de Estella", así como de productos con crema pastelera o nata. Los clientes que acuden a los puestos varían a lo largo del día, ha explicado Urrutia: "Por la mañana, las mujeres mayores, y a la tarde ya salen más las madres con niños". "Hemos venido por la tradición, para dar la 'vueltica' y comprar para los nietos, ¡y los hijos!", han comentado un grupo de señoras mayores, que llevan años acudiendo al mercado de San Blas "por la tradición" y un poco "para disfrute del morrico".

Por la tradición, este grupo de "veteranas" hace alguna que otra concesión a los dulces y las roscas de anís, pero con moderación: "Una hoy, otra mañana". Casi a las diez de la mañana ha salido de la Iglesia de San Nicolás la usual procesión que porta una figura de San Blas y bendice los dulces y los puestos, este año bajo un ligero aguanieve que ha obligado a los tenderos a colocar protecciones de plástico sobre los puestos para proteger los productos. Por la tarde está previsto el espectáculo de baile "soka-dantza" que llevarán a cabo los dantzaris municipales Duguna, a las 19,30 en el Rincón de San Nicolás.

Pamplona celebra San Blas. (Oskar Montero)