“La sombra pa' otro momento, a mi me gusta el cemento, voy a salir a la calle con crema y sombrero pa evitar Lorenzo”, cantaba el sábado el Diablo en el Paloteado de San Juan en el Barrio de Lourdes de Tudela con la música de fondo de la eurovisiva Zorra contra la “tala sideral” que el Ayuntamiento de Tudela ha realizado en todas las obras que acomete en Tudela. Tuvo tal éxito la canción y está la letra tan ceñida a la música que muy probablemente se convertirá en una de las canciones del verano para las fiestas de Santa Ana. No sería de extrañar que los personajes del Paloteado tuvieran que grabar este hit en un estudio y difundirlo ante las peticiones que recibirán para las peñas.
En lugar de conocido Zorra, repetían una y otra vez “tala, tala” entre los aplausos de los centenares de personas que asistieron al Paloteado, “si hago obra nueva vienen talas, si son reformas también tala, si la obra es de jardinería ¡hay más talas todavía!, Corredor Verde en el Ebro (tala, tala), padre Lasa, Azucarera (tala, tala), reformas en el Muro donde no dejo en pie ni uno…”, cantaban para seguir con el estribillo coreado “la sombra pa' otra momento...” para terminar con “no puedo parar de talar, a mi todo ya me da igual todo lo quiero arrancar con mi gran tala sideral”.
Fue uno de los puntos centrales de las críticas de esta tradición que puso en marcha el colectivo Anayak hace 50 años y los que también se les guardó un homenaje “esta gran asociación tiene un valor infinito por su enorme aportación. Fueron los precursores del Paloteado de San Juan. De la nada lo crearon por su esfuerzo y buen bailar. Corazón cultural del Barrio que gran semilla pusisteis, esta ovación solo es vuestra por lo bien que lo hicisteis”.
Sobre el escenario el Mayoral (Carlos Romano), Rabadán (Alberto Ramírez), alcalde (Óscar Gracia), La Pepa (Elena Sancho), Ángel (Adrián García, que se estrenaba), Diablo (Carlos Martínez) y Tarambana (Pablo Giménez) arremetieron contra el poder de todas las formas posibles, uno de los ejes de cualquier Paloteado, y comentaron los chascarrillos de vecinos y paloteadores del Barrio que han ocurrido durante el año, el otro eje, al tiempo que elogiaron el trabajo de la nueva Asociación de Vecinos del Barrio de Lourdes, de la peña Andatu (cumple 25 años), del Grupo Municipal de Danzas (60 años) y del CD Lourdes que precisamente el sábado certificó su ascenso.
Al alcalde, Alejandro Toquero, que vestía un chandal verde del CD Lourdes, ya le avisó el Mayoral “le viene de puta madre porque es como lo vamos a poner hoy” y ante el frío reinante anunció que “solo vamos a calentar a los de la primera fila” (donde se sienta los concejales) para los que también hubo un verso aprovechando que una paloteadora había suspendido todas las asignaturas “no debes desanimarte porque si sigues a este ritmo podrás en la primera fila sentarte”.
También criticaron la polémica por las copas que pagó el Ayuntamiento a ediles de toda la Ribera en fiestas de 2023, “el año pasado en fiestas, Día de l Merindad, el Consistorio pagó la comida de la hermandad, no contentos con eso, tras café y puro, 50 copas Toquero pagó sin ningún apuro, pero no de su bolsillo, fue el pueblo de Tudela quien esas rondas pagó. ¿No cobran suficiente sueldo público elevado que además hay que pagarles sus rondas y combinados? Y lejos de retractarse o pedirnos su perdón, todo son escusas para esquivar su marrón”.
Su escasa aparición por el Barrio de Lourdes desde que los vecinos protestaron contra el Plan Municipal, la mala conexión de los nuevos autobuses con el hospital para esta zona de Tudela (“es como el juego del parchís, ahora rojo, ahora amarillo” dijeron en referencia al color de las líneas), el mal estado de las obras del Nelson Mandela después de su inauguración, las piscinas cerradas, el frontón derruido de Ribotas, críticas a la ampliación de la planta de NILSA o el nuevo recinto ferial fueron otros temas tratados, “lo peor no es el recinto sino el trasfondo de todo porque este Ayuntamiento a todo hace oídos sordos”.
También entre aplausos fue recibida la crítica a la decisión de Toquero de expulsar de la Junta de Gobierno a la oposición, después de la moción de censura en Pamplona, “de la Junta de Gobierno se expulsó a la oposición, dejando UPN clara su intención de imposición. El interés partidista otra vez es lo que impera, en lugar de pensar solo en lo mejor por Tudela. Estar en la alcaldía es para hacer algo más, no solo lucir la pose para que lo vean sus fans. Ser el alcalde de todos es lo que debiera ser, gobernando a sus adeptos y a sus detractores también”. Entre los personajes estaba también la recién elegida eurodiputada por el PSN, Elena Sancho, que desde hace años hace de Pepa y que entre sus versos indicó, “con Chivite y sus socios siempre les veo discutiendo, a pesar de que en Tudela muchas cosas van haciendo. Las viviendas de Nasuvinsa hace meses terminadas y también en Coscolín otras más muy avanzadas. La financiación a Tudela sin duda se ha incrementado, otra cosa es que usted sepa como gestionarlo”.
Al alcalde, al que se refirieron en alguna ocasión como “casi presidente” por sus cargos en UPN, también le pidieron que “a las entidades sociales más la tienen que apoyar”, a lo que una de sus concejalas contestó con gritos “¿mas?”. Ante muchas de las críticas, el personaje del alcalde contestó a los demás “sobre los otros temas, que me imputan sin motivo, contestaré por escrito”, el alusión a las constantes contestaciones de UPN a la oposición en los plenos sobre los que también criticaron el trato que da a los vecinos “cuando no tienes excusas ése es su comodín, como el no dar la palara en el pleno a invitados, solo haciéndolo al final para evitar ser grabados”.
