Nuevos bailes con identidad propia

«'Aurrez aurre' es un espectáculo para disfrutar y para decir que la creación es un campo muy grande para el que tenemos elementos suficientes en nuestra tradición» señaló el director que además es responsable de la música y el vestuario en este trabajo.

Medio centenar de bailarines pertenecientes a los grupos Maritzuli de Biarritz y Eraiki de Behobia son los encargados de poner en escena la obra, con edades comprendidas entre los 15 y los 64 años. Claude Iruretagoyena resume la esencia de 'Aurrez aurre' señalando su intención de «dar una imagen, porque los espectáculos son imágenes». Para ello llega a través de un proceso en el que el mestizaje se ha convertido en una forma de buscar nuevos caminos. «Los jóvenes no querían bailar lo de siempre, y eso para mí era algo muy grave. Querían bailar algo nuevo, pero no sabemos a qué estamos llamando nuevo» señala. «Y la danza tradicional es tan rica que podemos seguir bailando cosas nuevas y mantener una identidad cultural importante». Así, el porcentaje de mestizaje se reduce en 'Aurrez aurre' para poner a los dantzaris cara a cara, y al público frente a ellos.

Cuatro piezas

El color, el ritmo, el sonido y el ambiente son los elementos comunes de este montaje con la danza tradicional, ya que el 90% de lo representado no existe como tal en las coreografías de siempre. El espectáculo tiene una duración aproximada de 80 minutos y se reparte en cuatro piezas. La primera, 'Ihaute', parte del carnaval. «Habla del final de un año y del inicio del siguiente, el cierre de una etapa y el comienzo de otra nueva, ¡si este tema no es contemporáneo dejo la danza!» exclamó Iruretagoyena. Relacionada con este tema sigue la segunda parte, 'Branletik jauziak', que recoge la forma antigua de representar la mascarada en Zuberoa.

Un paso más allá se da con 'Paperezko iantzak', una pieza precedida de un estudio que relaciona la Italia renacentista con la danza tradicional vasca. Así, los elementos paralelos sirven para ver los vínculos entre danzas tradicionales europeas y las coreografías populares en el País Vasco. La cuarta parte lleva el título romaní 'Ando drom' (Sobre la carretera). «Es la imagen que tengo de los zíngaros, que cogen la cultura del mundo entero y sacan la suya propia» explica el coreógrafo. Así, pasos de distintos bailes se unen para formar «el mestizaje de un viaje por el País Vasco».

Todo ello se acompaña de un diseño innovador en cuanto al vestuario. «Quería dar una imagen enorme de lo que se puede hacer para vestir a un dantzari» señala Iruretagoyena.

Investigación y creación

En nombre del grupo de danzas Kezka, Oier Araolaza señaló en la presentación que «es un placer y una gozada poder ver aquí a una compañía a la que seguimos desde hace años». El dantzari eibarrés señaló a Claude Iruretagoyena como una de las referencias más señaladas en su campo, «no sólo por su trabajo de investigación sino también por el de creación». Así, señaló 'Aurrez aurre' como «un espectáculo para disfrutar, muy alegre y en cuanto al vestuario... es apabullante». La concejala de Cultura María José Telleria subrayó la investigación sobre las danzas tradicionales que hay detrás de este montaje y lo asimiló al desarrollado por el festival Ezpalak que desarrolla Kezka desde hace unos años, coincidiendo con la Euskal Jaia. La representación de 'Aurrez aurre' se organiza en el marco de esta fiesta y se incluye también en el VI Circuito de Danza Contemporánea de Sarea y el Gobierno Vasco.