Música, danza y erotismo se citan en 'Catulli Carmina', el sábado en el Auditorio Barañáin

la coral de cámara de navarra ha logrado aliar a 70 personas para este espectáculo

La Coral de Cámara de Navarra (CCN) está protagonizando un potente inicio de temporada y el próximo sábado dará prueba de ello en el Auditorio Barañáin con el estreno de Catulli Carmina, un ambicioso espectáculo en el que se dan cita la danza, el erotismo y distintas vertientes de la música (coro, solistas y percusión). En total, la entidad ha logrado aliar a 70 artistas en torno a una misma propuesta que se representará a las 20.30 y de nuevo a las 23.00 horas, una sesión golfa donde la sensualidad y el atractivo de la propuesta seguro que se harán más presentes.

Junto a las 40 voces de la coral, participan en esta puesta en escena la compañía de danza Tempomobile y el Ensemble de percusión del Conservatorio Superior de Navarra, conjunto dirigido por Jesús Prades. Precisamente, la CCN presentó el proyecto ayer en una rueda de prensa celebrada en el centro, cuyo jefe de estudios, Juan Mari Ruiz, enmarcó esta iniciativa dentro de la línea de colaboraciones dirigidas a dar a conocer a los alumnos los entresijos del mundo profesional y, de paso, mostrar obras que de otro modo sería muy difícil que llegasen al público. Es el caso de Ionisation, de Edgar Varèse (1883-1865), pieza de siete minutos que el sábado funcionará como obertura previa a Catulli Carmina, obra de Carl Orff (1895-1982) que forma parte del tríptico Trionfi que abre Carmina Burana y cierra Trionfo di Afrodita. En palabras de David Guindano, ideólogo de este espectáculo y director de la coral, Ionisation supone todo un reto para los músicos. En su día, supuso una revolución, un golpe de efecto dentro del mundo de la percusión, ya que Varèse defendía que no se había inspirado en ninguna música anterior, sino en las leyes de la física y la naturaleza. De ahí los 38 instrumentos que se requieren para interpretarla y que, mediante la técnica de la expansión rítmica, genere una atmósfera tan sugerente, tal y como demostraron ayer los citados percusionistas al obsequiar a los periodistas con esta breve pieza.

La percusión es muy distinta en Catulli Carmina, "mucho más rítmica", según Guindano, que valoró muy positivamente "el lujo" que supondrá contar con tantos y tan destacados artistas sobre el escenario. Y es que esta es la producción estrella de la Coral de Cámara de Navarra para este curso, dadas sus dimensiones y la dificultad que acarrea trabajar con varias entidades. Así, tal y como explicó el productor, Iñigo Osés, no será hasta mañana, viernes, cuando todas las partes ensayen juntas. Todo un desafío para quienes participan en este montaje en el que el erotismo y la sensualidad que Orff imprimió a los textos clásicos en los que se basó para componer la partitura jugará un papel más que notable. Dichos textos cuentan el desamor entre Catulo y Lesbia, sobrenombre de Clodia, esposa de un senador romano, con escenas llenas de ironía, carnalidad y fatalismo que, en opinión de Guindano, Tempomobile ha sabido trasladar con buen gusto y elegancia.

una propuesta estimulante En nombre de la compañía de danza habló su fundadora y directora, Becky Siegel. "Nosotros lo hemos tenido especialmente difícil porque hemos creado de cero y los músicos disponen de los textos y de la partirura", apuntó. Sin embargo, el reto es "fascinante", añadió la coreógrafa. "Para mí ha sido un regalo muy estimulante volver a reencontrarme con este compositor al que conocí de joven", y más teniendo en cuenta que la obra es "tremendamente sugerente". Siegel subrayó, asimismo, el gran trabajo de los ocho bailarines que llevan trabajando desde junio en un ballet "muy arriesgado" que "requiere un movimiento muy salvaje unas veces y muy controlado otras". En ese sentido, "la gama de posibilidades expresivas es enorme", de ahí la cantidad de horas que han empleado en los ensayos "para lograr la confianza y la compenetración necesarias que nos permitirán entender los matices que nos va a aportar el directo".

Además de las voces de los coralistas, del enérgico acompañamiento de los percusionistas y de los pasos coreográficos, Catulli Carmina contará con dos solistas, el tenor andaluz Francisco Fernández-Rueda y la soprano vizcaína Ariadna Martínez, colaboradores habituales de la CCN. Para esta última, Lesbia es un papel breve, "pero muy intenso, hipnótico", que implica una importante dificultad técnica, a lo que se añade "lo interesante" y especial que será actuar junto a bailarines, acompasando la voz a sus movimientos.

Los bailarines de Tempomobile derrochan movimiento y sensualidad en este montaje. (Boutade Comunicación)