Edukira salto egin | Salto egin nabigazioara

Tresna pertsonalak
Hemen zaude: Hasiera Hemeroteka Maya + Marín = Yarín

Dokumentuaren akzioak

Maya + Marín = Yarín

Se presentó anoche en San Sebastián, en el marco de dFeria, este encuentro entre el dantzari Jon Maya y el bailaor Andrés Marín, espectáculo que esta misma semana irá a Barcelona. Allí estuvimos y esto nos pareció…
Egilea
Omar Khan
Komunikabidea
Susyq
Tokia
Donostia
Mota
Kritika
Data
2023/03/15
Lotura
Susyq

yar

Ni duelo de titanes ni batalla de contrarios. Yarín, cuyo título nace de la conjunción de los apellidos de sus creadores, es más bien un encuentro cordial. En principio y apariencia, el de dos lenguajes de danza, dos vocabularios ya perfectamente estructurados y reconocibles como son el aurresku y el flamenco, pero muy por encima de eso, supone la reunión de dos artistas de hoy, dos mentes creadoras aparentemente en las antípodas, que coincide además que ambos son portadores del Premio Nacional de Danza. Jon Maya, vasco de origen dantzari, y director de la reconocida agrupación vasca Kukai, y Andrés Marín, andaluz de estirpe flamenca, deciden dialogar en escena para verificar su entendimiento. Así hay que ver este dueto poético en riguroso blanco y negro, que se ha presentado anoche en el Teatro Victoria Eugenia, de San Sebastián, en el marco de dFeria, encuentro escénico que entra hoy en la recta final de su vigésimo novena edición.

Más gato sagaz el del norte y más tigre feroz el del sur, Maya y Marín son felinos escénicos. La levedad caracteriza al primero y la fuerza del zapateado define al segundo. Renuncian aquí al modelo consabido del duelo entre dos contrincantes y se niegan a la tentación de imitarse o intercambiar roles. Eso sí, tienen un territorio común, el de la danza contemporánea, que es la licencia que les permite la expresión libre y desde donde cada uno por su cuenta aborda y transgrede los bailes populares que son raíz y principio del que parten en sus respectivos trabajos escénicos.

Mantener la democracia y la equidad, ahora juntos, se lo permite el tercer vértice imprescindible de la obra, el compositor e intérprete en directo Julen Acgiary, que crea esa música insistente, a veces susurrante y, por momentos, de percusiones tribales, que no es flamenca ni tradicional vasca, aunque recurra a elementos asilados de ambas.

Por fortuna, Yarín se aleja de lo predecible. No es fusión ni hibridación de lenguajes. Tampoco certamen de virtuosismo ni competición del más difícil todavía. Su estructura coreográfica, intencionadamente esquemática, alterna intervenciones solistas de uno y otro, hasta que muy de a poco va aproximándonos al grand pas de deux final, que es más diálogo, reconocimiento y aceptación el uno del otro, que estruendosa traca final. Danzan ambos unidos física, emocional y estilísticamente. Cada uno se mantiene en su registro pero siempre con conciencia del otro. Un abrazo fraternal cierra con serenidad esta propuesta sobria y elegante.

Los del sur ya valoraron esta peculiar reunión durante su estreno en la pasada Bienal de Flamenco, de Sevilla. Los de norte, la contraparte del espectáculo, la miraron anoche con avidez y ojo crítico, y este mismo fin de semana, llega la coreografía a Cataluña, territorio neutro que la ha programado el próximo 18 de marzo en el Teatro Joventud, de Hospitalet, en el marco del Festival Dansa Metropolitana, de Barcelona.

Dokumentuaren akzioak