Dokumentuaren akzioak
Los dantzaris marcan el compás festivo
Desde hace más de cuatro siglos los bailes y castañuelas del Corpus anuncian la llegada de la festividad
Desde hace siglos la llegada de la festividad del Corpus es sinónimo en Oñati de zortzikos, banakos, arcos y castañuelas. El papel de los dantzaris en las celebraciones es tal, que bien podría hablarse de un reinado simbólico que comienza mañana y concluirá el domingo. Son tres días bailando, que marcan el compás de una festividad que ha trascendido lo religioso, para convertirse también en reclamo turístico y fiesta de guardar para muchos foráneos. No es de extrañar, por tanto, que la Oficina de Turismo suela aprovechar el interés, para organizar una visita guiada muy especial en la que conocer mejor algunos de los entresijos de la procesión, un ritual folclórico y religioso, que Oñati ha mantenido generación tras generación desde 1478.
El tour será el domingo, a las 9.45 horas, con plazas limitadas e inscripciones en el número de teléfono 943.783453. Pero antes, desde mañana mismo, Oñati empezará a empaparse de su fiesta más universal, con los dantzaris de Oñatz como emisarios o abanderados. Los nueve elegidos vivirán un fin de semana tan intenso como agotador. Mucha gente se pregunta cuántas veces pueden llegar a bailar cada pieza en estos tres días. Hace unos años, solo el sábado por la mañana, bailaron 92 piezas (56 zortzikos y 36 arku-dantza), cifras que sirven para ilustrar el maratón de bailes que Oñatz afronta como uno de los fines de semana más especiales del año.
El peregrinaje arrancará mañana por la mañana en los barrios rurales y continuará por la tarde, de 14.30 a 17.00, en los distintos centros de enseñanza. Una encuentro que han vivido en su infancia, distintas generaciones de oñatiarras. Al atardecer los dantzaris, capitaneados por segundo año por Iñigo Murgiondo, visitarán también Ugarkalde, San Martín y Casablanca antes de retirarse a descansar.
El sábado, la ronda proseguirá por las calles y barrios del centro urbano, con salida desde la plaza a las 9.00 horas, y exhibiciones durante todo el día. Pero, todavía quedará la jornada más intensa y emotiva, la de la procesión del domingo. Los dantzaris, al son del Zortziko de San Miguel, escoltarán en pequeñas procesiones, hasta la parroquia, a los representantes de las hermandades que participan en el desfile con su santo a hombros.
Lo harán en riguroso orden establecido desde antiguo. La última efigie será la de San Miguel Arcángel, patrón de la localidad, que partirá del Ayuntamiento ante del inicio de la misa mayor. La ceremonia religiosa contará también con la actuación de los dantzaris en el altar, que luego cortejarán a los apóstoles personificados y el personado de San Miguel, desde Santa Ana hasta la iglesia para recoger al Santísimo. La procesión propiamente dicha estará a punto de comenzar y los dantzaris no pararán de corretear y bailar al son de las castañuelas entre las imágenes y cofradías hasta llegar a la plaza, donde bailarán el banako ante el Santísimo. Tras el ritual procesional todavía quedará otro clásico, el alarde vespertino, con todo el repertorio de las 'Korpus Dantzak'.
Seña de identidad
No hay duda de que una de las principales características del Corpus oñatiarra es su repertorio de danzas, que tiene continuidad desde el siglo XVI. Los investigadores no saben a ciencia cierta cuándo empezaron a representarse pero la primera referencia escrita data de 1560. Desde esta fecha hasta nuestros días se han seguido escenificando año tras año como puede comprobarse en el libro de cuentas del Ayuntamiento, el de la parroquia de San Miguel y los de las cofradías. Estos ejemplares recogen las cantidades que las instituciones y colectivos oñatiarras destinaban al pago de los danzantes y txistularis por participar en el ritual procesional.
La documentación existente no ha permitido asegurar con certeza si aquellas danzas son las mismas que conocemos en la actualidad. La mayoría de los investigadores de la fiesta folklórico-religiosa opinan que sí, aunque todos coinciden también en señalar que tampoco sería de extrañar que en algo hubieran cambiado, aunque no lo suficiente como para desfigurarlas de su primitivo sentido religioso.
Dokumentuaren akzioak