Dokumentuaren akzioak
Las espadas sonaron en Zumarraga
Por segunda vez, las mujeres participaron en esta antigua cita local que a pesar de la lluvia reunió a un buen número de vecinos
Las espadas volvieron a ser la protagonistas de la actuación de los dantzaris de Irrintzi que bailaron ayer ante Nuestra Señora de la Asunción. La tradicional ezpata dantza fue interpretada por los dan-tzaris locales durante la solemne misa mayor. Por segunda vez, las mujeres bailaron la ezpata dantza de Zumarraga y por primera vez lo hicieron en la plaza. El estreno de las féminas en la interpretación de la antigua danza fue el día de Santa Isabel, en la ermita de La Antigua -que este año opta al premio de Repsol al Mejor Rincón del Estado-. Dos mujeres fueron capitanas y otras cuatro salieron en la cuerda. Oihane Vicente, Josune y Nekane Martín, Ane Egia, Inés Aztiria y Amaia Plazaola fueros las primeras mujeres en interpretar el baile de espadas en Zumarraga. Ayer volvieron a participar en esta especial cita para los zumarragarras y recibieron los aplausos de sus vecinos.
La lluvia no fue óbice y ante un buen número de vecinos, la plaza de Euskadi acogió el aurresku de honor de los dantzaris locales. Los miembros de Irrintzi repitieron su actuación de la ezpata dantza ayer, día de Andra Mari, en los bajos del Ayuntamiento, donde tras concentrarse los txistularis, dantzaris y autoridades, se dirigieron en comitiva hasta la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, donde antes de comenzar la ceremonia litúrgica se interpretó la danza. Finalizado el baile, los dantzaris abandonaron el templo y se dio comienzo a la misa mayor.
Terminado el oficio religioso, los dantzaris y txistularis acompañaron a las autoridades al Ayuntamiento, lugar desde el que presidieron el aurresku de honor, que fue interpretado en la plaza de Euskadi.
Danza de gran tradición
Cabe recordar que hasta 1972 concretamente, las fiestas patronales de Zumarraga se celebraban a mediados de agosto, motivo por el que los dantzaris vuelven a bailar con las espadas el 15 de este mes.
El origen de las mismas se debe al cambio de la sede parroquial que tuvo lugar en 1576. Hasta entonces, el santuario de Santa María de Zumarraga, La Antigua, había sido la iglesia parroquial de la localidad y en consecuencia las fiestas se celebraban en julio.
Con la ubicación de la parroquia en el valle, las fiestas se trasladaron al mes de agosto en honor a la virgen de la Asunción, fecha vigente hasta los años setenta, cuando de nuevo se optó por trasladar las fiestas de Zumarraga al mes de julio.
Otro de los actos que antaño se celebraba a mediados de agosto era la procesión de San Roque. Tenía lugar el día 16, concretamente. Al igual que el día anterior, las autoridades, precedidas de dantzaris y txistularis, se dirigían a la parroquia para, a continuación, llevar a cabo una procesión con la imagen de San Roque, que arrancaba desde la puerta lateral de la iglesia parroquial de la Asunción, bajaba por los números impares de la calle Piedad, giraba a la altura del edificio del antiguo Itzalon, y subía por los números pares de la calle, entrando en la iglesia por la puerta principal.
Dokumentuaren akzioak