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La Quincena Musical homenajea hoy a Jorge Oteiza en Donostia y Arantzazu
Esta tarde, el Ciclo de Música Contemporánea de la Quincena acogerá el primer concierto de Sigma Project, conjunto recién nacido que reúne a Josetxo Silguero, Rodrigo Vila, José Miguel Cantero y Andrés Gomis, cuatro reconocidos solistas de saxofón que han decidido ponerse a disposición de los compositores para crear nuevas obras específicas surgidas de un contacto muy cercano con ellos.
Fruto de esta filosofía es el primer estreno que el grupo dará a conocer hoy, «Macla», del gasteiztarra Guillermo Lauzurica, estreno integrado en la serie de homenajes que la Quincena está dedicando a Jorge Oteiza en el centenario de su nacimiento.
«Macla» comparte título con las conocidas esculturas que Oteiza creó en los 50, aunque éstas no inspiraron la partitura. «Cuando comencé a escribir la obra -explica Lauzurica-, no tenía ninguna intención de relacionarla con Oteiza; sencillamente, quería ver cómo desa- rrollar el material que había elegido». Fue a posteriori cuando el compositor decidió dedicar la obra al escultor, «cuando descubrí que el material había creado una estructura de tipo mineral, en forma de macla». Y es que el título, aunque haga referencia a Oteiza, se imbrica más con el significado geológico de la palabra macla, la asociación de dos o más cristales gemelos, orientados simétricamente respecto a un eje o un plano.
Pero, aunque la relación de «Macla» con Oteiza sea poco más que casual, la obra y el pensamiento del oriotarra siempre están presentes en Lauzurica, que lo considera «un genio y el artista por excelencia de Euskal Herria». Entre los aspectos que más admira el compositor está «la coherencia de Oteiza a la hora de plantear y desarrollar el material, que en ocasiones es algo inmaterial, como puede ser el vacío». Y considera su propia obra, como la de Oteiza, «muy constructivista, fría, de la misma forma que puede serlo una caja vacía».
Lauzurica, curiosamente, no intenta adornar su obra para venderla mejor al público. «Se trata de una música árida -reconoce-. He intentado hacer algo expresivo, pero el resultado ha salido como ha salido. Sería más apropiado llamarlo una experiencia estética que una música bonita o fea. Yo me siento bastante ajeno al resultado».
Además de «Macla», el Sigma Project interpretará también otras obras hoy, dentro de un recital que lleva como título genérico «Stockhausen promenade». Para conmemorar la muerte del compositor alemán, abordarán tres obras pertenecientes a la gigantesca y monumental «Licht» (Luz), también conocida como la ópera de los siete días, en la que Stockhausen llevaba trabajando desde 1977. Estarán también representados dos compositores vascos: Luis de Pablo, con una de sus últimas obras, «Rumia», y Gabriel Erkoreka, con «Duduk-2», inspirada en el folklore armenio, concretamente, en el instrumento tradicional llamado duduk, una especie de oboe de madera de albaricoque de sonido muy dulce.
Por último, Sigma Project rescatará «Fractal», de Cristóbal Halffter, pieza extremadamente difícil y complicada, compuesta originalmente para cuarteto de saxofones y orquesta.
Sigma Project, además del trabajo con los compositores, está especialmente concienciado con hacer llegar la música contemporánea al público. Por ello, el concierto contará con unas notas al programa escritas con este propósito, y contará también con la colaboración del escenógrafo gasteiztarra Gabriel Larrainar, que se ocupará del aspecto visual.
El Sigma Project se estrenará hoy, a las 20.00, en las salas polivalentes del Kursaal. Antes, a partir de las 17.30, en el santuario de Arantzazu, tendrá lugar el espectáculo «Apostotuen dantza», rematado con la intervención de Andoni Egaña y seguido de un recital de la soprano Barbara Hendricks.
Suele ser habitual que las grandes estrellas del mundo clásico, amigotes entre ellos, se junten ocasionalmente para tocar música de cámara. Quizá no se puedan comparar con los grupos estables que dedican años a conocerse a la perfección, pero, a veces, los solistas consiguen resultados extraordinarios gracias a la suma de sus grandes talentos. Los donostiarras, que tanto han echado en falta la música de cámara en los últimos años, podrán disfrutar esta tarde, a las 20.00 horas, en el Victoria Eugenia, del trío formado por el violinista Frank Peter Zimmermann, el chelista Heinrich Schiff y el pianista Christian Zacharias, los tres habituales en Quincena y los tres extraordinarios intérpretes de sus respectivos instrumentos. Además, juntarán sus fuerzas para enfrentarse a músicas tan bellas como las que pueblan los «Tríos con piano» de Schubert. Pero no serán las únicas estrellas de la constelación clásica que brillarán esta noche, porque a las 19.30, en el santuario de Arantzazu, actuará nada menos que la soprano Barbara Hendricks, cantando obras de Copland, Mahler, Poulenc y Strauss. Mikel CHAMIZO
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