La pareja de Bergara, Igartua y Bazeta, se llevó el concurso infantil de baile al suelto

La pareja de Hernani quedó octava en Plaza Berri El certamen contó con una buena asistencia de público

La pareja de Bergara fue elegida por el jurado como la más completa en todos los aspectos en los que se centraba su análisis. Ello le permitió sumar al final del concurso 200 puntos, los únicos que llegaron a esta cifra de todas las parejas participantes. En torno a las 13.00 horas se conoció la pareja de campeones y, como es costumbre, los triunfadores bailaron dos piezas más tras enfundarse el pañuelo y la txapela.



Tras los de Bergara quedaron situados en esta edición Santos y Lekuona, de Lezo, con 195 puntos. Además de ello, esta misma pareja se hizo con el trofeo EL DIARIO VASCO a la mejor vestimenta, algo que también se tiene muy en cuenta en estos concursos. El tercer lugar recayó en Arrillaga y Medina, de Bergara, también con 193 puntos.



El cuarto lugar fue para Olariaga y Larrañaga, de Azkoitia, que el año pasado se hicieron con el triunfo en Plaza Berri. En esta ocasión sumaron 191,5 puntos. El quinto y último puesto de honor del concurso del domingo fue para la pareja de Bergara, Arrillaga y Bolinaga, con 129 puntos.



Muy buena participación, por tanto, de los dantzaris de Bergara, que han conseguido meter tres parejas entre los 5 primeros de la clasificación final. La pareja de Hernani, formada por Aimar Abad y Aitziber Amantegui, culminó su participación en el puesto octavo.



Cada pareja tuvo que bailar un fandango y un arin-arin, que fueron puntuados por tres componentes de la Federación de Dantzaris de Gipuzkoa. El jurado tuvo que centrarse a la hora de otorgar sus puntuaciones en la ejecución, la dificultad, la conjunción de la pareja sobre el escenario y el ritmo de la misma. Los trikitilaris de Anoeta, Beñat Luluaga y Lierni Garmendia, fueron los encargados de tocar las piezas para el baile de los dantzaris.



El desarrollo de todo el concurso de baile al suelto organizado por Kriskitña Dantza Taldea contó con una buena asistencia de público, que aguantó una mañana fría y humedad.