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La ópera-ballet 'Los siete pecados capitales' cerrará el martes el Ars Sacrum en el Teatro Arriaga
La representación tiene como coprotagonistas a la soprano Mary Carewe y a la bailarina solista Catherine Allard.
El espectáculo llegará a Bilbao a las 20.00 horas
en el teatro Arriaga, un día después de su estreno mundial en la 47
Edición de la Semana de Música Religiosa de Cuenca, evento para el que
ha sido especialmente concebido.
La obra está
dirigida por Frederic Amat, quien se ha encargado también de la
concepción artística, la escenografía y la creación videográfica.
"Estoy encantado con el proyecto. Cuando me lo propusieron ni me lo
pensé, me fascinó", explicó ayer el artista catalán.
historia La
obra tiene como coprotagonistas a la soprano Mary Carewe y la bailarina
solista Catherine Allard. El Coro Tenebrae y la Joven Orquesta Nacional
de España (JONDE) interpretarán la música, bajo la batuta de José Luis
Estellés. Los siete pecados capitales es una ópera-ballet que consta de prólogo, siete cuadros y epílogo, dividida en dos actos diferenciados, La esfera de Pascal y Los siete pecados capitales.
Apenas un lustro antes de que Hitler se proclamara Canciller de
Alemania, una pareja se reunió para dar una vuelta de tuerca al
concepto wagneriano de obra total, orientándolo hacia la representación
popular y cabaretera con la indisimulada intención de agitar
conciencias. La pareja estaba formada por Bertolt Brecht y Kurt Weill,
y su unión dio lugar a trabajos como La ópera de perra gorda y Los siete pecados capitales, con la que finalizó la colaboración de estos dos genios.
Este
ballet cantado u ópera-ballet, estrenado sin mucho éxito en París en
1933, es un "magnífico ejemplo de teatro épico y expresionista", cuya
partitura era considerada por su autor como su mejor trabajo. El
argumento habla de dos hermanas, Ana I y Ana II, enfrentadas a los
siete pecados capitales, en su peripecia por siete ciudades americanas
tratando de lograr el dinero suficiente para construir una casa para su
familia.
El artista Frederic Amat (izq) y Emilio Sagi, director artístico del Arriaga, ayer, en Bilbao. Foto: Zigor Alkorta |
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