La lluvia se sumó a la fiesta

La lluvia se quiso sumar a las fiestas de Elgoibar y contó con un protagonismo indeseado durante la mañana de ayer, desluciendo parte de la programación festiva de la jornada dedicada a San Bartolomé. Las gotas que cayeron durante la noche dieron lugar a que la mañana de ayer se levantará encapotada. Las amenazadoras nubes auguraban lo peor instantes antes de que diera comienzo la procesión del día de San Bartolomé pero, a pesar de ello, se optó por cumplir con la tradición y la figura del patrón de Elgoibar pudo completar su recorrido por las calles Rosario y San Bartolomé sin contratiempos.

La Soka-Dantza protagonizada por Haritz E.D.T. también se salvó de la lluvia. Un año más, los dantzaris elgoibarreses cumplieron con esta tradición, tal y como vienen haciendo desde hace más de setenta años. Una a una fueron desgranando las diferentes piezas que componen este baile, para disfrute de los espectadores que acudieron en buen número a la plaza de los Fueros, aunque su presencia fue algo menor a la de años anteriores.

La que no tuvo tanta suerte fue la Banda de Música. Al poco de iniciar su actuación, las nubes hicieron caer su carga de lluvia sobre la localidad. Los más previsores, echaron mano de los paraguas con los que habían salido de sus casas y aguantaron estoicamente, sentados en sus asientos, el desarrollo del concierto. Los que no tuvieron la suerte de contar con un paraguas, buscaron refugio en los pórticos de la casa consistorial y la casa Alcorta para disfrutar con la actuación de la agrupación musical dirigida por José Antonio Osoro Aguirre, a la que despidieron con una cálida ovación.

La jornada de ayer tuvo como hecho anecdótico la presencia de un equipo de producción de una televisión alemana durante el desarrollo de la procesión. Las imágenes que recogieron formarán parte de un documental sobre el País Vasco que tiene como hilo conductor un viaje en ferrocarril. En el caso de Elgoibar, los periodistas alemanas tienen previsto recoger, además de las imágenes de la procesión, escenas de uno de los festivales de pelota, así como el campeonato de levantamiento de piedra que tendrá lugar durante el día del Baserritarra.

Una de las notas destacadas de estos primeros días ha sido la poca presencia de gente en las calles de Elgoibar. Así se ha podido ver en los diferentes actos que han tenido lugar durante el día y, en especial, la noche de la víspera, en la que las calles de Elgoibar presentaron un aspecto bastante alejado del que acostumbra a tener una localidad en fiestas. Esta circunstancia se viene dando de año en año y las razones hay que buscarlas en el interés de muchas personas por alargar lo más posible sus vacaciones fuera de la localidad. Esta dinámica se romperá en parte hoy ante el reclamo de la celebración del día del Txiki, una jornada que muy pocos elgoibarreses se pierden, así como con la proximidad del fin de semana, fecha en la que las calles de Elgoibar se convierten en un auténtico hervidero de gente.