La identidad de Pamplona, en un baile

El estreno de la Iruñeko ezpata-dantza , realizada por el grupo de Dantzaris duguna, fue un éxito

"Ha sido un éxito para nosotros porque siempre hemos bailado danzas aprendidas y esto ha sido un reto". Estas fueron las palabras de Aritz Ibáñez, uno de los principales promotores del baile, tras concluir el cortejo. El baile, protagonizado por el grupo de dantzaris Daguna, comenzó a las 11.30 horas en el puente de Curtidores (Rochapea) con el agiteo de la bandera de Pamplona, símbolo de saludo, y que protagonizó el pamplonés, Ángel Lesa. "Alguien lo tenía que hacer y me tocó a mi porque soy fuerte. No lo he hecho por ningún motivo en especial ", afirmó Lesa.

Los miembros del grupo Daguna, formado por 35 dantzaris y seis txistularis, estuvieron presentes durante todo el recorrido de la procesión. Al terminar ésta, rápidamente se dirigieron a la plaza del Ayuntamiento, donde tuvo lugar el esperado baile.

La plaza estaba abarrotada de personas. Los más pequeños no dudaron en hacerse un hueco en primera fila, sentados permanecieron casi sin parpadear. Por su parte, los mayores no tuvieron tanta suerte. Algunos se subieron a los bancos para disfrutar del espectáculo, sobre todo, los de pequeña estatura. Por el contrario, los más altos no encontraron ninguna dificultad.

El baile dio comienzo con el llamado degollao, que atrajo la admiración de los asistentes. Incluso, hubo alguno que, emocionado, no pudo contenerse la lágrima. Todos los danzantes simularon la muerte de San Fermín en Amiens (Francia). De esta forma, la tropa tejió una parrilla de espadas alrededor del buruzagui (el capitán) y a quien se le levantó mientras Ángel Lesa ondeaba la bandera cara al Ayuntamiento. El cierre de la danza tuvo lugar en la Iglesia de San Fermín de Aldapa con un baile protagonizado por el buruzagui y elzerbitzari.

Emotivo y nuevo. Con estos adjetivos calificaron la Iruñeko Ezpata- Dantza, Leticia Esáin, Oihane Percaz, Aitor Arana y Myriam Monente, participantes en el baile. Minutos antes confesaron sentirse "muy nerviosos por ser el estreno". Pero cuando terminó, estaban "muy orgullosos y aliviados".

El grupo Daguna empezó hace dos años con un proceso de documentación. "Nos basamos en testimonios antiguos de dantzaris en Pamplona durante los siglos XVI, XVII y XVIII", dijo Ibáñez. "En concreto, quiero dar las gracias al grupo de danzas Arguia (Donosti) por su ayuda", añadió el director del grupo.

Todos los miembros del grupo vestidos de blanco y rojo, con alpargatas blancas de cintas rojas, zapas con cascabeles, faldín plisado, camisa blanca, dos bandas rojas cruzadas en el pecho, un escapulario con las cinco yagas, la imagen del Santo, el escudo de Navarra y el escudo de Pamplona y en la cabeza una kaska de flores; coincidieron en afirmar que "el baile fue impresionante".

El grupo de danzas Duguna realiza la Ezpata-Dantza en la plaza Consistorial.Foto: unai beroiz