Quienes viven el ballet o la danza como una pasión bien saben que cuando el asunto coge vuelo este arte resulta imparable, no hay nada ni nadie en el mundo que lo detenga. Les cuento todo esto para poner en contexto la gala Bilbao es Ballet, un proyecto ilusionante y emotivo; un nuevo evento para difundir y crear un espacio en el que el protagonista sea el talento de nuestra tierra en el campo del ballet clásico. La idea nació en el Estudio de Ballet Clásico Teresa González Ardanaz, donde el ballet se adora como un dios contemporáneo. Quienes la conocen bien saben que Teresa es una diosa en puntas y que su entrega por la danza es fabulosa. La gala Bilbao es Ballet, presentado por Unai Izquierdo, celebró ayer tarde una nueva edición, con parte del patrocinio cubierto por DEIA. Atrajó a un sinfín de gente que disfrutó de lo lindo con lo presenciado, que fue una maravilla. El legendario Mikel Jauregi, bailarín, coreógrafo y director de Gauthier Dance con un trabajo espectacular en el camino. No por nada, es un trotamundos que ha recorrido gran cantidad de escenarios.

La gala y premio Bilbao es Ballet tuvo lugar en Euskalduna Bilbao y, como en ediciones anteriores, el evento trajo de vuelta a casa a ese talento local que está triunfando fuera de sus fronteras. Marta Rueda (English National Ballet, Semperoper Ballett Dresden, Ballet Nacional de Lituania, Ballet Nacional Sodre y Ballet de l’Opéra de Lyon) actuó acompañada por Roylan Ramos (Ballet de Camagüey, Ballet de la Ópera de El Cairo, Compañía Tanz de Innsbruck, Oklahoma City Ballet y Ballet de la Ópera de Lyon). También ofreciero su talento en el Auditorium Andoni Larrabeiti (Ballet de Euskadi, Ballet Clásico de Madrid, Compañía Nuevo Ballet Español, La Joven Compañía…), en colaboración con el cantante turco Fuat Tuaç, el escritor bilbaino Errikarta Rodríguez y el investigador y docente universitario Eduardo Blázquez. Tampoco faltaron Enara Artola, ganadora del concurso Dantzatu, Gaizka Medina e Iratxe Mallabiabarrena. Además, en la gala participó el alumnado becado por la Diputación Foral de Bizkaia que está cursando sus enseñanzas profesionales y preparándose para futuros puestos de trabajo en compañías estatales e internacionales. Fue todo un despliegue.

En el programa de la gala destacó la interpretación de la obra La Loca de Arriquibar, pieza coreografiada por Mikel del Valle y que está bajo la dirección de la propia Teresa González Ardanaz con música de Basabi y Verde Prato e interpretada por Natividad Ubis, Bruno Donizeti, Mercedes Ochandiano, Nagore Bilbao, Alexia Valenzuela, Leyre Barañano, Kristyna Márquez y Ángela Ubis, la presencia de parte del profesorado del Estudio del Ballet Clásico compuesto por Miryam Villanueva, Ana María Lebrero, Ana Rosa Tercero, Amparo Olmeda, Sara Etxebarri e Iker Murillo y de autoridades como la diputada foral Leixuri Arrizabalaga, el concejal Gonzalo Olabarria o el director gerente de Euskalduna Bilbao, Iñigo Iturrate.

Creo que fue Charles Baudelaire quien nos dijo que el baile puede revelar todo el misterio que la música contiene. Ayer disfrutaron de esa revelación del secreto gente como Josune Lavín, diseñadora de tocados, Edita Hernáez, Josean Babio, Laurent Leger Adame, Itziar Ansoleaga, Cristina Bañales, Mirentxu Aretxabala, Ismael Díaz, Mari Carmen Escribano, Irene Díaz, Maite González, José Luis Díaz; el legendario trío del bar Alameda formado por Paco García, María Alunda y Beatriz García; el bailarín en ciernes Mario Tellechea, Teresa Álvarez Cascos, Gonzalo Garitaonaindia, Loli Fernández, Iratxe Iturburu, Susana Pollán, Nerea Sanromá, Josune López, la artista gráfica Ane Picaza o cuatro amantes de la danza como Maitane Pellejero, Clara Merino, Ana Saez y Nora Vega entre otra gente con ritmo y son.