La Escuela de Danza del Gobierno de Navarra se traslada al colegio José Vila

Iniciará allí el curso próximo por falta de espacio en el García Galdeano de la Chantrea. Compartirá sede con la asociación de vecinos, los cursos del CAP y los talleres de pintura del Ayuntamiento

De este modo, el departamento de Educación del Gobierno foral atiende las reclamaciones del García Galdeano, que, por ser el único centro de la zona que imparte una sola línea en los modelos A y G, ya tuvo que asumir el el curso 2005-2006 a parte del alumnado del modelo A del Arturo Kanpion, a lo que en 2007-2008 se han sumado 125 estudiantes de 1º de Infantil, que, en teoría, deberían haber comenzado el curso en el nuevo Colegio Doña Mayor de Navarra, en Ezcaba, que tenía previsto impartir el modelo concertado con el British Council y que todavía se encuentra en obras. Todo esto, unido a que la Escuela de Danza ocupaba la mitad del inmueble, había generado una situación que la Apyma del García Galdeano consideraba insostenible y que podría solucionarse, al menos en parte, con el traslado del esta última a un nuevo emplazamiento.

itinerancia Además de liberar espacio en el centro de la Chantrea, Educación considera que esta operación supone dar un importante impulso a la actividad de la Escuela de Danza. No es de la misma opinión su directora, Ana Moreno, para la que "el verdadero impulso sería adecuar un espacio propio para la práctica de la danza". Y es que, Moreno, que "agradece el esfuerzo que hacen desde el departamento para buscarnos un lugar mejor del que ocupamos ahora", defiende que la Escuela debería ser una apuesta de futuro y prepararse para completar su oferta de nivel Elemental y Medio con el Bachillerato Artístico, lo que incrementaría el alumnado y, por tanto, se necesitaría una sede diferenciada.

Pero esto no va a suceder de momento y esta iniciativa educativa promovida por Jesús Zamarbide en los años 70 y continuada por Moreno junto con los hermanos Lainez desde los 80 deberá continuar su itinerancia. Y es que, después de dar sus primeros pasos en el Conservatorio de la calle Aoiz, a mediados de los 80 se trasladó a una bajera de la calle Urzainqui, después a un local de las Madres Canosianas para instalarse, hace diez años, en el García Galdeano. "Y ahora nos volvemos a marchar", dice Moreno, que piensa ya en el nuevo destino, el José Vila, que, construido en 1965, ya no se encuentra en funcionamiento como centro educativo, aunque sí alberga diversas actividades con las que convivirá la Escuela de Danza. Entre ellas, el Centro de Apoyo al Profesorado (CAP), los talleres de pintura del Ayuntamiento de Pamplona, así como algunas acciones de la asociación de vecinos. Nuevamente, una sede compartida que, en el caso de la tercera planta, deberá someterse a varias obras de acondicionamiento (suelo, vestuarios, etc) para albergar los pasos de cerca de 250 bailarines.