La danza toma el protagonismo en el Festival de Teatro

El Ballet Nacional de Marsella sube esta noche al escenario del Principal

A principios de mes fue el turno para Ramón Oller y su La trición de Madama Butterfly . Dentro de un par de semanas le llegará al turno a Teresa Nieto y De cabeza . Pero hoy el protagonista es el Ballet Nacional de Marsella. La danza también respira en la programación del XXXIII Festival Internacional de Teatro de Vitoria de la mano de estos tres buenos referentes, género al que el público siempre suele responder con agrado. De hecho, quien no tenga su entrada para hoy ya puede darse prisa porque casi no quedan a la venta.

La cita será, como de costumbre, a las 20.30 horas sobre el escenario del Principal. Y allí, el público se encontrará con una compañía que, bajo la dirección de Frederic Flamand, se ha convertido en una referencia de la escena europea gracias a su tratamiento de la danza neoclásica y contemporánea. No en vano, el coreógrafo es uno de los grandes nombres del panorama actual, hombre muy solicitado y de larga trayectoria.

Más de 20 intérpretes tomarán las tablas de la calle San Prudencio para presentar tres coreografías bien diferentes, pero que darán una buena idea de lo que significa este grupo, aunque seguro que muchos aficionados al género habrán podido ver a la formación en sus visitas tanto al Estado como a Euskadi (en primavera pasó por el Kursaal donostiarra).

Para comenzar, la compañía francesa abrirá su presencia en la capital alavesa con Tattoo , pieza de Michel Kelemenis. Fruto del encuentro de este creador con los bailarines del Ballet de Marsella, sus movimientos fluídos y balanceantes contrasta con la técnica académica representada por las puntas que caracteriza a la agrupación francesa. En esta coreografía se explora como cada uno de los lenguajes marca e influye en el otro con su propio ritmo.

Después se ofrecerá Té To Té , de Yasuyuki Endo. Se trata de una nueva creación de este mismo año en el que Occidente y Oriente comparten idiomas y formas de expresión, dejando que cada uno de los lados se influencie.

Por último, el grupo concluirá el espectáculo con la obra Somewhere , con coreografía de Julien Lestel y música de Philip Glass. En esta pieza se lleva la danza neoclásica a su límite con extraordinarios movimientos que fusionan la fluidez, la técnica de la danza, la armonía y la emoción.

Se completará así un programa en el que a lo largo de una hora y diez minutos se podrá ver a uno de las formaciones europeas más interesantes y llamativas de la escena actual.

Un momento del espectáculo.Foto: D.n.a.