La danza protagonizará la gala de los X Premios Max el lunes en Bilbao

La bailarina Sol Picó dirigirá el acto en el que actuarán, entre otros, Igor Yebra y Virginia García

Picó presentó ayer en Bilbao, junto al coordinador artístico del acto, Pera Piñol, los detalles de la gala de la X edición de los Premios Max, que tendrá lugar en el Palacio Euskalduna de la capital vizcaína y en la que actuarán figuras de la danza como el bilbaíno Igor Yebra y el bailaor flamenco Israel Galván.

Sol Picó, graduada en Danza Española y Clásica por el Conservatorio Oscar Espía de Alicante y una de las bailarinas y coreógrafas españolas más laureadas, expresó su satisfacción por el hecho de que se haya decidido dedicar "una gala, la que sea y más si es de los Premios Max, a la danza". Explicó que "la gala está pensada para hablar de todos los tipos de danza que existen, por lo que se verá un poco de danza clásica, otro poco de contemporánea, otro poco de moderna, un poco de flamenco y también un poco de danza vasca".

La historia que planteará Picó en el acto convertirá el moderno escenario del Palacio Euskalduna en la sala de ensayo de una clásica academia de danza y a la conductora de la gala, la actriz vasca Gurutze Beitia, "en una bailarina frustrada, un poco loca, pero feliz". Picó explicó que ha preparado dos coreografías "muy locas y divertidas" para las actuaciones de Igor Yebra, quien le pidió que le hiciese "algo distinto a lo que suele ser su repertorio habitual" para lo ocasión, según apuntó.

La directora del espectáculo, que sus organizadores esperan tenga una duración aproximada de una hora y 45 minutos, señaló que tanto los números del bailarín bilbaíno como del resto de los artistas que intervendrán -el grupo de danzas vascas Kukai y la bailarina vasca Virginia García Fernández, acompañados al piano por Carlos Santos-serán "sorprendentes". El coordinador artístico de la gala, Pera Piñol, destacó que con esta gala dedicada a la danza se cierra la trilogía iniciada en 2005 en Guadalajara con un evento consagrado a las letras españolas y que prosiguió el año pasado en Barcelona con la música, en concreto los géneros líricos por excelencia, la zarzuela y la ópera, como protagonistas.