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Gran ambiente
La coincidencia con el fin de semana y un día soleado animaron a que muchos eibarreses acudieran a Arrate para disfrutar del día grande de su patrona
Para muchos, cada vez más, el día comenzó temprano ya que desde
primeras horas de la mañana ya se veían grupos que enfilaban el camino
de los pasos de la Virgen para llegar a Arrate. Otros eligieron el
transporte urbano que como cada año, y de forma ininterrumpida, salía
de la calle Toribio Etxebarria. Aunque la frecuencia de los autobuses
era alta, a media mañana la espera rondaba la hora, una prueba más de
que Eibar se quedó en su casco urbano con muy poquita gente.
Una vez arriba, la visita a la iglesia se hacía obligatoria para
muchos, mientras que otros se acercaban a las txoznas instaladas en la
campa. Algunos de los que se veían no habían subido ni en autobús ni
por el camino de los pasos: simplemente empalmaban la noche con el día
ya que no hay que olvidar que las fiestas de Arrate comenzaron el
viernes.
Tras el pasacalle de la Banda de Txistularis Usartza la Misa Mayor
fue la protagonista de la mañana de ayer. Y siguiendo la tradición
inaugurada hace dos años la ezpatadantza de la Virgen de Arrate llenó
de baile y colorido el final del oficio religioso. Para entonces muchos
eibarreses se concentraron en los alrededores del santuario para vivir
en primera persona otro de los actos principales de la jornada, la
tradicional procesión en la que tomaron parte la Banda de Txistularis
Usartza, los integrantes de Kezka Dantza Taldea y diversas autoridades.
Tras realizar el recorrido que llevó a la comitiva hasta la cruz de
Arrate, los integrantes de Kezka Dantza Taldea interpretaron en medio
de la campa, un año más, los diferentes bailes que componen, hasta la
fecha, el ciclo de 'Arrateko Amaren Dantzak': 'Gipuzkoako
ezpatadantza', 'Arrateko makil txiki', 'Arrateko makil haundi' y
'Arrateko brokel dantza'. «Aunque tenemos todavía alguna danza por
estrenar hemos preferido que les suene más a la gente y por parte de
nosotros también hacernos más a ellas», precisó Oier Araolaza, miembro
de Kezka.
Como viene siendo habitual desde su estreno en septiembre de 2005,
la Cofradía de Dantzaris de Arrate (que este año contó con la
participación de más de cuarenta personas) volvió a invitar este año a
cuatro dantzaris para que participaran en los puestos destacados de la
fiesta eibarresa. En esta ocasión fueron Jokin Otamendi y Jesús Larrea,
a los que se unieron los invitados que participaron hace dos años.
Tras la comida de hermandad, ocho parejas de baile al suelto
volvieron a traer la animación hasta la campa. Tras un reñido concurso
los vencedores de este año fueron la pareja de hermanos Azpitarte, de
Azkoitia.
PROGRAMA PARA HOY
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