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Emotivo homenaje al jesuita Gaizka Barandiaran por su apoyo a la dantza
El acto tuvo lugar en la Diputación Foral de Gipuzkoa y hasta allí se acercaron diferentes personalidades de la dantza y un centenar de amigos y ciudadanos
En un acto más que emotivo que se celebró, a mediodía, en la Diputación Foral de Gipuzkoa, el Aita Gaizka, recogía un más que merecido reconocimiento de manos de Euskal Dantzarien Biltzarra y la Asociación de Txistularis del País Vasco, por toda una vida dedicada a «conservar el folklore del pueblo», según apuntaba Josemari Velez de Mendizabal, escritor de las memorias Gaizka Barandiaran. Bere bizitza eta lanak. «No es pecado sentirse orgulloso tras una vida tan intensa y llena de dedicación» proseguía, «pero si algo le caracteriza a Gaizka Barandiaran, es su humildad».
También tuvo palabras de reconocimiento para el homenajeado, el Diputado General de Gipuzkoa Joxe Joan González de Txábarri, quien tras un repaso por algunos de los trabajos que ha realizado Gaizka, le felicitó en nombre de todos los guipuzcoanos y reconoció «el orgullo que sentimos todos por su trabajo».
Mikel Aranburu, en representación de Euskal Dantzarien Biltzarra, quiso dar unas pinceladas a la relación entre dantzaris y txistularis con Gaizka y subrayó que «en aquella época, podía haberse quedado en casa como otros tantos, pero Gaizka Baradiaran luchó denodadamente por la esperanza y la fe en los jóvenes a través del doble pilar de la fe cristiana y el convencimiento de que el folklore era el alma del pueblo».
Jose Ignacio Ansorena, por su parte, quiso ofrecerle su propio homenaje personal al que definió «como el mejor maestro que he tenido nunca» junto con el dantzari Jon Maia, que interpretaron una soinu zaharra al final del acto.
Gaizka Barandiaran se mostró callado y atento mientras sus compañeros y amigos hablaban de su vida, y recibía emocionado el primero de tres galardones de manos del Diputado General, una placa conmemorativa. Xabier Mendizabal le concedía el segundo, en forma de batuta, y una makila de parte de Euskal Dantzarien Biltzarra. El Aita Gaizka dedicó unas palabras a un público espectante que rompió en aplausos cuando afirmó que «el pueblo tiene que ser feliz, y así me gusta veros, felices».
La jornada terminó frente a la Diputación Foral, donde antiguos dantzaris interpretaron una Soka Dantza ante la atenta mirada del homenajeado. «Un día que sin duda alguna no voy a olvidar» concluía Gaizka Barandiaran.
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