El amor a la cultura se plasma en la conservación de las tradiciones y el folklore. Es el caso de las danzas vascas, que mantienen gran arraigo popular. De ahí que no cese el interés de personas de todas las edades por aprender estos bailes con historia. Conscientes de ello, Bizkaiko Dantzarien Biltzarra centra su actividad en la enseñanza de las euskal dantzak. Además, de su mano se puede aprender a tocar instrumentos tradicionales como la dulzaina, el pandero o el atabal.
Quienes estén interesados en aprender a bailar danzas vascas o en perfeccionar sus conocimientos pueden apuntarse en la web www.dantzanet.net a los cursillos que impartirá Bizkaiko Dantzarien Biltzarra para todos los niveles. Tras rellenar el formulario de inscripción y enviarlo, cada monitor contactará con los/las interesados/as para indicarles los días de clase.
Variedad y vistosidad
Las euskal dantzak se distinguen por su variedad y vistosidad, como se comprueba en las romerías tradicionales que suelen tener lugar en Bilbao y en muchos de sus barrios. Fandango, arin-arin, jauziak, Larrain dantza… son algunos de los bailes más habituales en el repertorio de las llamadas plaza-dantzak o bailes de plaza. Aprender los pasos no es tarea complicada si se toma con ánimo y ganas. Tampoco la edad es una traba. De hecho, es habitual ver bailar a varias generaciones cuando suena la música popular en las plazas de Euskal Herria.
De la mano de Bizkaiko Dantzarien Biltzarra es posible “aprender sin prisas y con horarios flexibles, superando así esa asignatura pendiente que por falta de tiempo o por cualquier otro motivo se ha postergado en muchas ocasiones”, como indican desde la propia Federación. De esta forma, a la vez que se mantiene la tradición, se disfrutará participando de los bailes populares en las romerías cuando suene la música.
A este respecto, programas municipales como Dantza Plazetan, que contribuye a potenciar el folklore popular vasco en Bilbao, “animan a practicar lo aprendido en nuestros cursillos, por lo que tienen gran acogida”, subrayan las mismas fuentes.
Junto a las nuevas incorporaciones, hay buen número de alumnos/as fieles que acuden a las clases de Bizkaiko Dantzarien Biltzarra una hora a la semana, dispuestos a seguir aprendiendo y mejorando la técnica que pueden exhibir con orgullo en las romerías a pie de calle.
Éxito de participación
La música que va unida a tales bailes populares y que, a su vez, los hace posibles, también es atendida por la federación vizcaina con cursos de distintos instrumentos tradicionales, véanse el pandero, la gaita, la dulzaina o el atabal. A lo largo de su trayectoria de tres décadas en esta enseñanza vienen registrando un éxito de participación que les anima a seguir impartiendo cursos, adaptados a la demanda.
Porque “nunca es tarde cuando se trata de aprender”, esta nueva temporada que comenzará en octubre, Euskal Dantzarien Biltzarra abre sus puertas a todas aquellas personas amantes del folklore que quieren vivirlo en primera persona.