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El coreógrafo Grigorovich presenta el clásico 'Don Quijote' ligeramente modernizado

Egilea
Teresa Flaño
Komunikabidea
Diario Vasco
Tokia
San Sebastián
Mota
Albistea
Data
2005/08/19

El momento que no faltará es el famosos paso a dos de este ballet intepretado por Anna Antonicheva en el papel de Quitri y Dmitry Belogolovtsev en el de Basil. La pareja, que pertenece al Bolshoi, es en opinión de Grigorovich «la mejor de estos momentos y por eso les he pedido que se sumen a nuestro espectáculo». De hecho los dos bailarines no pudieron estar en la rueda de prensa que los responsables de la compañía ofrecieron ayer porque se encontraban viajando desde Nueva York donde actúan con su ballet.



No es sorprendente que esta pareja acceda a la invitación de Yuri Grigorovich porque este coreógrafo ha sido una de las figuras más importantes del ballet ruso al dirigir durante treinta años -de 1964 a 1994- al Bolshoi de Moscú. En el reparto también destacan los solistas Alexander Penkov, que representará Don Quijote, y Vadym Stupka, encarnando el papel de Sancho Panza.



Tres actos



Dividida en tres actos, más prólogo y epílogo, esta versión de Don Quijote, con música de Ludwig Minkus, fue estrenada en 1999. Leonard Gatov, director general del ballet y fundador de la compañía, comentaba ayer la satisfacción que le produccía que San Sebastián fuera el lugar donde se viera por primera vez fuera de Rusia este montaje. «Vinimos hace unos años al Victoria Eugenia con Spartacus y la acogida que tuvimos fue estupenda». La duración aproximada es de tres horas, incluidos los dos descansos.



En Don Quijote se suceden las andanzas y avatares del hidalgo acompañado de Sancho Panza. La taberna de Lorenzo es el punto de partida del espectáculo, lugar donde la presencia de los protagonista suscita asombro, curiosidad, intriga y bromas por parte de los clientes. Entre éstos se encuentran la fogosa e impulsiva hija de Lorenzo, Quitri, y Basil, barbero enamorado de la joven. Lorenzo, sin emrbago prefiere como pretendiente de su hija a un rico hidalgo llamado Gamash. No obstante, Don Quijote siente simpatía por la joven pareja, oponiéndose a los deseos de Lorenzo de dar a su hija en matrimonio al viejo e impúdico Gamash.



Grigorovich comentó que «se trata de una sucesión de cuadros, no es una historia lineal con principio y fin». También aclaró que «el argumento está basado en la famosa novela española, pero no se trata de una reproducción de las costumbres o el folklore españoles, es ballet clásico». Ese clasicismo se trasmite, además de con la danza, con una decoración -que se ha estrenado para la gira que están realizando ahora- y un vestuario muy colorista pero que no es nada trasgresor.



El Grigorovich Ballet Krasnodar nació hace diez años gracias al mecenazgo Leonard Gatov. Actualmente, el ballet está compuesto por más de noventa bailarines formados en San Petersburgo, Kiev y Moscú. La compalía se ha convertido en una institución de referencia para las grandes coreografías clásicas como El Cascanueces, Gilselle y el Lago de los cisnes. El conjunto ha sido invitado a participar, entre otros, en el Festival de Atenas y el Spoletto de Italia. Después de San Sebastián acudirán a Barcelona y a continuación al Festival de Danza de Cannes que este año está dedicado a las compañías de danza rusas.



Preguntados sobre si conocían la situación de la danza en España, tanto Gatov como Grigorovich señalaron que «está en muy buen momento, muchas compañías tienen entre sus solistas a figuras de la talla de Lucia Lacarra, Tamara Rojo, Igor Yebra o Ángel Corella.



EL PROGRAMA

Auditorio del Kursaal: 'Don Quijote', por el Grigorovich Ballet Krasodar, con las estrellas del Ballet Bolshoi Anna Antonicheva y Serguei Filine. A las 19 horas.

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