Drama lorquiano en baile flamenco

Crítica, Yerma, Cristina Hoyos

La cantaora Ana Ramírez diseña con recio decir el proceso del poema trágico con voz segura y fraseada. La novel en papel protagonista Susana Casas, como Yerma, aporta su frescor juvenil con su baile sucinto, vestuario de terciopelo y porte alegre. El Junco sufre al bailar por el talante serio y austero que le toca representar (Juan), y Cristina Hoyos recuerda su talento bailaor moviendo con presteza sus manos y brazos, con gestos y flexiones corporales muy ajustadas al guión, logrando emocionar al respetable. El cuerpo de baile mixto del Ballet Flamenco de Andalucía, comandado por su directora y guía Cristina Hoyos, trenza un baile flamenco fino, elegante y brioso en cualquiera de los palos flamencos, que ejecutan con avío, soltura y taconeo firme.



Un vestuario sedoso y grácil y una escenificación sobria reciben de la luminotecnia y trasparencias cambios oportunos que embellecen aún más la textura del baile flamenco tan cabal interpretado por este equipo.



Los bravos y aplausos del público lograron bises individuales y colectivos de buen sabor artístico. -

OTXANDIO