De las txingas a la ezpatadantza

La actuación se abrirá con un primer baile frente al arco principal de la parroquia y continuará con un nueva interpretación junto a la Casa de Cultura. La comitiva bailará luego junto a la hornacina de la Virgen del Rosario y, antes de cerrar su actuación bailando frente a la casa consistorial, rendirá un homenaje a los historiadores Peio Arrieta y Koldo Lizarralde, y al coreógrafo Juan Antonio Urbeltz, en reconocimiento a la labor que ha hecho posible la recuperación de una tradición que se había perdido.

El origen de la ezpatadantza se remonta a varios siglos atrás en la historia de Gipuzkoa y, a día de hoy, está muy asentada en localidades como Zumarraga, Legazpia o Deba, en las que se interpreta en los grandes días de fiesta. En el caso de Elgoibar, hay constancia de celebraciones de este tipo en el año 1599 así como referencias a la interpretación de esta pieza por parte de la Cofradía de la Virgen del Rosario las primeras semanas de octubre. La costumbre se perdió, pero hoy volverá a tomar vida con una recreación que promete hacer las delicias de los espectadores.