Estamos acostumbrados a los desfiles de moda convencionales, sobre una pasarela, pero no a que una firma cree su propio espectáculo para mostrar sus creaciones y, es más, contar una historia. Oteyza, ahora, sube la moda al escenario del Museo Universidad de Navarra (MUN) con Merina, este lunes a las 20.00 horas.
Es un espectáculo “apasionante tanto para los amantes de la música electrónica, como de cualquier tipo de estilo de danza, o, por supuesto, la moda”. Tal como explica Paul García de Oteyza, cada uno puede encontrarle un significado según sus vivencias, ya que “no marca un solo camino, sino una multitud”. Esta propuesta está nominada a seis Premios Max de las artes escénicas 2024: mejor espectáculo de danza, mejor producción, mejor composición musical, mejor coreografía, mejor escenografía y videoescena, y mejor vestuario.
Merina narra la historia de la creación textil española sirviéndose de diversos estilos de música, danza y las prendas características de la firma. Una de ellas es la capa, que nos hace pensar en los pastores navarros. De hecho, García de Oteyza, cuya familia desciende del Valle del Baztán, explica que ha querido dar cabida a esta tierra, “que ha unido siempre toda la fuerza de la tradición y toda la fuerza de la naturaleza”. La obra del fotógrafo José Ortiz Echagüe, albergada en la Colección del MUN, es otra de las inspiraciones de la firma: bebe de sus retratos del costumbrismo y las indumentarias de la España de finales del siglo XIX y comienzos del XX, trabajando para que entren de lleno en la época actual.
Antonio Najarro, director del Ballet Nacional de España entre 2011 y 2019, ha sido traducido al movimiento la historia de la moda de nuestro país, con música de Tagore González, que incluye electrónica, pero también folclore. Para el coreógrafo, ha sido “un reto”, especialmente “unificar los mundos diferentes” que aparecen en los cuatro actos: El nacimiento, con los bailarines descalzos con cencerros y palos, representando el origen: la oveja merina y el pastor; El trazo, donde aparece la línea hacia la configuración de las prendas, a través de movimientos clásicos y líneas depuradas; La obra viva, con tejidos rojos y negros y las alpargatas de jota vistiendo danzas folclóricas, mientras que la danza estilizada española se pone la capa negra y el sombrero cordobés; y Alta vanguardia, que incorpora de lo urbano, lo contemporáneo y la música electrónica.