Dantza Zalduondo

La cita comenzó a las 12.30 horas cuando las inmediaciones del Palacio de Lazarraga comenzaron a convertirse en un hervidero de blusas y neskas, calentando motores antes de emprender la kalejira hacia el frontón. Irati, de Agurain, portó la ikurriña y fue la encargada de encabezar la comitiva. Tras ella, el resto de dantzaris, nerviosos ante la exhibición de bailes en el polideportivo. En total, salieron al escenario 70, para interpretar un variado compuesto por trece bailes, entre ellos: agientariena, esku dantza, txantxo dantza, Pello Joxepe, gorulari, arbol, la jota de Elciego, San Pettit, sagardantza, Zuberoako maki txi, Tudelako jota, banako o txontxongilo. Los más pequeños trataron de seguir con más o menos acierto el ritmo de txistus, tamboriles, albokas y acordeón en un recinto engalanado con dibujos alusivos al baile y la cultura euskaldun. En lo alto del frontis, una gran pancarta daba la bienvenida a los asistentes y recordaba que "un pueblo que baile, nunca morirá".

El frontón se convirtió en un improvisado escenario con el sin par colorido de los trajes de las dantzaris: cuadros azules, a rayas, rojos, verdes, bancos y rosas; todas las tonalidades en una cita que reúne a niños y jóvenes de la Llanada en torno a una tradición transmitida de generación en generación. Fieles defensores del folklore, los chavales reconocen, además que, "sabiendo bailar, en las fiestas se farda mucho, sobre todo, cuando en la verbena suena la jota", apuntan.

Asimismo, desde las agrupaciones se aprovechó la jornada para hacer un llamamiento a una mayor participación en los grupos de danzas. Nerea Barquilla, de Jeiki Taldea de Agurain reconoció que "necesitamos chicos en el grupo". Y pidió a los padres que inculquen a los pequeños el amor por el baile. Después, llegó el momento de la recompensa. La primera en forma de placa para cada uno de los tres grupos participantes. Y la segunda, en forma de suculentos manjares que se sirvieron en la campa próxima al frontón.

Los grupos de dantzas de la Llanada estrecharon lazos ayer en Zalduondo