Cultura apuesta por el impulso final al Centro de Artes Escénicas

En su día, se presentó como el Plan que «marcará las líneas de actuación en el mundo cultural», basándose en «el acuerdo entre los diferentes agentes públicos y privados sobre la visión estratégica, los criterios de actuación y las prioridades para la cultura vasca».

En lo que respecta a los proyectos de futuro que Miren Azkarate consideró «claves para hacer avanzar el Plan», pueden subrayarse por su alcance la creación del Instituto de Artes e Industrias Culturales y del Centro de Enseñanza de las Artes Escénicas. Ambos forman parte de la larga lista de previsiones que contiene, desde sus primeros planteamientos, un Plan con más de cien acciones en cartera.

La consejera compareció en compañía del viceconsejero de Cultura Gurutz Larrañaga y de representantes de los equipos salientes de las diputaciones forales de Alava y Vizcaya y de los ayuntamientos de Bilbao y Vitoria. No estuvieron presentes en el acto los representantes de la Diputación Foral de Gipuzkoa y del Ayuntamiento de San Sebastián, que el pasado otoño decidió dejar de participar en las comisiones de un Plan que tiene uno de sus pilares en su carácter interinstitucional.

A medio camino

Hace unos meses, Miren Azkarate reconoció retrasos en el cumplimiento de los objetivos fijados en el Plan Vasco de la Cultura. Ayer, estableció el grado medio de ejecución de las acciones previstas en el 58,43%, rebajando en tres puntos el dato que aportó en noviembre el Consejo Vasco de la Cultura. Azkarate adelantó que, según las previsiones, para finales de 2008 la primera fase del Plan estará ejecutada prácticamente en su totalidad, sobre la base de las acciones que se prevén en cada uno de los diez ejes estratégicos que constituyen su estructura básica.

Destacó la consejera los avances que se han producido en materia de coordinación entre las instituciones, y entre éstas y los sectores culturales. En lo que respecta a la creación de nuevas estructuras culturales, entre las realizaciones incluyó el diseño del Máster de Artes y Espectáculos Escénicos que se pondrá en marcha el próximo curso con la colaboración de la UPV-EHU; la creación del Observatorio Vasco de la Cultura; la aprobación en el Parlamento Vasco de la Ley de Museos y la elaboración de la Ley de Bibliotecas, que podría aprobarse en otoño. El Decreto de las Televisiones Digitales –en este momento se están estudiando las propuestas, y podría adoptarse una decisión este mismo mes–, la creación del Instituto Etxepare como instrumento para internacionalizar la cultura vasca o la consolidación de la red de teatros Sarea se presentaron también entre los proyectos ejecutados.

Al referirse al apoyo prestado a los sectores culturales, Azkarate subrayó el incremento de un 10% en los presupuestos de Cultura –«hay dinero para desarrollar el Plan», afirmó–, haciendo una especial mención al incremento del apoyo al sector audiovisual, que ha llegado al 16%. Dentro de ese mismo sector, se derivan del Plan Vasco de la Cultura las nuevas líneas de financiación a la producción audiovisual.

Tal como puede verse en el gráfico, uno de los campos en los que menos se ha avanzado es el relativo a las políticas de fomento cultural vía, fundamentalmente, desgravaciones fiscales. En la actualidad, también en este campo cada diputación tiene sus normas, y el objetivo que se plantea de cara al futuro es «analizar el impacto que han tenido esas medidas y avanzar en la coordinación y la puesta en común».

Las propuestas de actuación para este ejercicio y el siguiente no incorporan novedades sustanciales, ya que todas se basan en previsiones realizadas en años anteriores. «Nos hemos esforzado por detectar cuáles son los proyectos tractores que pueden hacer avanzar el Plan, y haremos un esfuerzo especial en ellos», indicó Miren Azkarate.

Dos de esos proyectos parecen llamados a centrar la actividad y la atención de los próximos meses: el denominado Instituto de Artes e Industrias Culturales y el Centro de Enseñanz de las Artes Escénicas. El primero, una vieja reivindicación del sector cultural que tiene equivalentes en varias comunidades autónomas, se ocuparía de «todo lo que se quiere hacer en el campo del teatro, la danza, la producción audiovisual..., dinamizando y agilizando los proyectos y la gestión de las ayudas». De momento, carece de un proyecto preciso, aunque Miren Azkarate dijo que «está bastante avanzado» y que el Gobierno elaborará y aprobará una propuesta que posteriormente, en forma de proyecto de ley, será remitida al Parlamento para su aprobación, requisito imprescindible para la creación de un Instituto sobre el que no se aportaron más detalles.

Un aspecto muy relacionado con el sector audiovisual, que por su volumen económico cobrará especial protagonismo en el futuro Instituto, es la firma del segundo contrato programa con EITB, en el que deberá incluirse, por mandato del Parlamento, el polémico 5% dedicado al audiovisual que EITB nunca ha cumplido.

Tampoco se aportaron más detalles sobre el Centro de Enseñanza de las Artes Escénicas que los profesionales de la escena vienen reclamando desde hace años como medio para paliar las actuales carencias en el campo de la formación. El Gobierno Vasco tiene un mandato del Parlamento para avanzar en la creación del Centro, cuya sede viene siendo reclamada desde hace años por ayuntamientos como el de Bilbao. Miren Azkarate recordó que el proyecto debe abordarse en colaboración con el Departamento de Educación, y reiteró que están trabajando en ello.

En el apartado del desarrollo legislativo quedan también tareas por finalizar, como la puesta en marcha de la Ley de Museos y la Ley de Bibliotecas –pendiente todavía de aprobación por el Parlamento– y la elaboración y tramitación de la Ley de Archivos. El incremento del doblaje de películas al euskera, la elaboración de una nueva normativa para la FM y el desarrollo de un «centro de coordinación de la digitalización» forman también parte de los proyectos prioritarios a corto plazo.