El Estatuto del Artista es una eterna demanda del mundo cultural, que debería haber estado listo a finales de 2022 y que deberá reformar las condiciones bajo las que se rige un sector, que además ha sido uno de los más castigados durante los últimos años. Los profesionales de la cultura llevan años pidiendo un cambio sobre un modelo aprobado hace 30 años y que necesita ser actualizado, mejorado y adaptado a la realidad actual. De momento, el Gobierno español aprobó el pasado martes, 10 de enero, una de las medidas más importantes: la primera prestación especial por desempleo para el sector cultural y artístico, es decir, el derecho a paro adaptado a la intermitencia del sector, rebajando a la mitad los requisitos de días cotizados para que artistas y técnicos puedan acceder más fácilmente a dicho subsidio.
La epidemia del coronavirus mostró de la manera más descarnada posible el abismo que se abre cuando las giras de conciertos desaparecen, los teatros cierran o los rodajes se paran. Por ello, la medida ha sido aceptada con satisfacción por todos los sectores culturales, que la consideran un primer paso para paliar la precariedad del mundo de la cultura. Sin embargo, todos coinciden en que todavía hay un largo camino por recorrer.
Teatro
Gurutze Beitia, actriz
“El martes, cuando se aprobaron estas medidas, recibí las llamadas de varios compañeros y compañeras para manifestarme su alegría. Es una buena noticia, estamos encantadísimos y encantadísimas. Es un primer paso hacia el fin”, explica Gurutze Beitia.
La actriz bilbaina se considera una privilegiada, no le falta el trabajo. Dentro de unos días hará también las maletas para participar junto a Ainhoa Arteta en Trato de favor, proyecto musical que será dirigido por Boris Izaguirre y que se estrenará en el Teatro de la Zarzuela de Madrid. “Afortunadamente el trabajo no me falta, pero esta es una profesión muy inestable. Es muy complicado vivir de la cultura en general. Se agradece que nos ayuden a sobrellevar el mes. Muchas veces tenemos que hacer un sobreesfuerzo para pagar la cuota de autónomos todos los meses. Ahora vamos a tener un régimen de prestaciones por desempleo que reconoce el carácter esencialmente intermitente de nuestra profesión, como desde hace tiempo lo reconocen países como Francia”.
Con las nuevas medidas se permitirá acceder a una prestación cotizando 60 días en los últimos 18 meses o 180 días en los últimos seis años, frente a los 360 para otros sectores. “Desgraciadamente no tenemos función todos los días. Era muy complicado reunir tantos días para poder acceder al paro. Muchos artistas tienen que diversificar su trabajo, dedicarse también a otras cosas, pero así todo resultaba difícil. Parece que hay luz al final del túnel”, asegura la intérprete vasca.
La segunda medida adaptada afecta a una de las demandas históricas del colectivo: ya desde el año 2019, después de que las denuncias de algunos escritores penalizados, como Javier Reverte, Caballero Bonald o Antonio Gamoneda, desataran la polémica, los artistas jubilados pueden percibir la pensión y, al mismo tiempo, seguir cobrando sus derechos de autor acumulados con los años. A partir de este momento, se les permitirá también recibir ingresos por actividades artísticas para que puedan seguir creando obra nueva. “No es cuestión de edad, no se deja de crear, esta profesión es muy peculiar. Hay grandes actrices que con 70 años están estupendas sobre el escenario y escritores que firman su mejor libro”, afirma Beitia.
Música lírica
Miren de Miguel. soprano
En pleno desmantelamiento de programaciones, conciertos, recitales y representaciones de ópera por la crisis del coronavirus se formó el sindicato de artistas líricos, del que la soprano vasca Miren de Miguel ha recibido la información de las nuevas medidas. “Reconocen la intermitencia laboral y eso es algo muy importante, pero habrá que estudiarlo más a fondo, habrá que ir a un asesor para aclararlo porque cada caso es diferente. En cuanto a la prestación por desempleo, va a ser complicado, pero es importante que se haya dado un primer paso, que se nos reconozca porque nosotros, los artistas, somos los intermitentes. Lo mismo estamos trabajando mucho que nada de nada, aunque el hecho de no estar dada de alta no significa que no tengas un gran proyecto. Te estás preparando. Un superespectáculo te lleva mucho tiempo y eso para nosotros es también trabajo”, remarca esta soprano, guionista, periodista y defensora de la igualdad. “Cuando pides una ayuda al Gobierno vasco te valora el proyecto global, pero nosotros no debemos estar supeditados a las ayudas”, asegura.
Para Miren de Miguel la profesión de los artistas es de “suicidas y locos”. “Normalmente, tiramos de dar clases... pero eso te quita tiempo para dedicarte a la creación. Si eres autónoma, durante ese tiempo no ganas absolutamente nada. Son solo gastos y tenemos que pagar la cuota de autónomos trabajemos o no”.
Danza
Mikel del Valle, bailarín y coreógrafo
El bailarín y coreógrafo bilbaino Mikel del Valle se formó en danza clásica con Ion Beitia y Carmen Roche y transitó hacia la danza contemporánea posteriormente. En 2016 fundó la compañía MDV Danza con la que ha estrenado numerosos espectáculos. Mikel del Valle, que ha participado en la coreografía de la serie Sky Rojo, que se ha estrenado esta semana en Netflix, también ha celebrado las nuevas medidas que se pondrán pronto en marcha. “En Francia ya se llevan aplicando hace tiempo. Me alegro de que por fin se adopten en España. Es lo que la mayoría de los profesionales del sector estábamos reclamando hace tiempo”.
Para Musikari, la asociación de profesionales de la música de Euskal Herria, son “medidas sin precedentes, aunque también apelan a la cautela”. Musikari reconoce que no se incluyen todas las medidas que demandaban, pero sí el paro para los artistas, jubilación y plena compatibilidad del trabajo artístico, y un tramo de cotización para los artistas autónomos con ingresos bajos, que “carecen de una falta de equilibrio tremenda”.
La rebaja en la cotización y las novedades en la jubilación de los artistas entrarían en vigor el 1 de abril de 2023. Y la prestación especial recién aprobada para los artistas, el 1 de julio de 2023. El Estatuto del Artista se enfrenta todavía a lo más complicado: el compromiso de Hacienda por crear una fiscalidad específica a la intermitencia y definir qué es un trabajador cultural autónomo. En el sector, el 30% del total de los trabajadores en el Estado son autónomos y sobre ellos no hay nada aprobado. También que Hacienda aclare los gastos deducibles.
