Carnaval a la vuelta de la esquina

Hace ya un mes que comenzaron los ensayos, y hoy vuelven a citarse en los locales de Errekalde. «Están viniendo alrededor de un centenar de personas, así que sumando los músicos y los miembros de Oñatz saldríamos unas doscientas personas el sábado de carnaval» explican fuentes de la agrupación, incidiendo en que las puertas están abiertas aún a todos los que quieran participar «no tienen más que venir a los ensayos los martes y sábados, y prepararse el disfraz que es muy fácil con los patrones que facilitamos».

Tras la excelente acogida que ha tenido los últimos seis años la representación de bailes de carnaval de la tradición euskaldun, en Oñatz pensaron que sería bonito tener una mascarada propia y se pusieron manos a la obra. «Le comentamos el proyecto al historiador Jerardo Elortza, al director de la Banda Inaxio Ibarrondo y contactamos con el eibarrés Oier Araolaza, autor del libro 'La danza vasca' y todo un especialista», explicaron.

De todos han aprendido, y guiados por ellos han configurado el Carnaval de Oñati, fiesta en la que personajes tradicionales como el oso, saldrán acompañados del conde y la condesa de la villa en su desfile por las calles, y los dantzaris llevarán una indumentaria autóctona diseñada para la ocasión. Además, la música de Antonino e Inaxio Ibarrondo, y las coreografías creadas por Oñatz buscan convertirse en todo un referente festivo.

La danza ha estado muy presente en el panorama cultural oñatiarra, y tiene una arraigada tradición como se demuestra en el Corpus, pero según los expertos, no hay referencias explícitas sobre el carnaval, una muestra de que las fiestas en honor a Don Carnal no han tenido excesiva relevancia en el municipio.

Así que puestos a dar a luz un carnaval propio buscaron a un padrino de lujo: Araolaza. Y con sus consejos, fecundaron una «criatura» meditada y querida, que espera un bautismo multitudinario .

En lo referente a la vestimenta, no habrá distinción por sexos, y se ha optado por la comodidad, fácil confección y los contrastes. Así, los dantzaris llevarán pantalón blanco y camisa multicolor, se cubrirán la cara y lucirán txapela con borla. Los músicos, a su vez, llevarán pantalón negro, colorista camisa, capa negra y txapela con doble borla.

La música es esencial en cualquier fiesta que se precie y, conscientes de ello , han mimado mucho este capítulo. Polkas creadas para la ocasión por el actual director de la Banda Municipal Inaxio Ibarrondo, y la recuperación de piezas clásicas de la tradición oñatiarra escritas por su padre Antonino, como 'Kale zarra', 'Bixamona', 'Ume haundiak', 'Gure Artzaia' o 'Gero', que antaño eran la estrella de los populares bailables, vuelven a la agenda festiva local con el objeto de sentar cátedra.

Las danzas y coreografías son, por otro lado, el punto fuerte de las mascaradas. Oñatz era consciente de que un carnaval propio exigía una escenografía propia, y ha preparado una serie de piezas que pretende ampliar en ediciones y que, de momento, se representarán junto a otros bailes típicos.

En cuanto a los personales, además de la comparsa habitual (oso, novios, autoridades...) las calles de Oñati verán desfilar al conde y la condesa de la villa. Ellos serán dos de los protagonistas principales de la fiesta exhibiendo el poderío y la gallardía que dispusieron en su día. Predominio que al final de la jornada cambiará de signo al concluir la mascarada con el pueblo sometiendo a los ilustres.