La Catedral de Boise celebra esta tarde el 25 aniversario de la incorporación de los bailes de Oñati al acervo local

Ocurría antes y sigue ocurriendo ahora, no sólo en relación a la cultura euskaldun. Por ceñirnos a nuestra cultura, digamos que hay costumbres que una vez fueron 'Made in Euskadi' y que hoy, tras ser asumidas y desarrolladas por los vascos en la Diáspora y adquirir vida propia en un nuevo contexto, pasan a extender y enriquecer su naturaleza y se convierten, de vascas de tal o cual pueblo de Euskadi, a vascas de Buenos Aires o de México o de --éste es el caso-- Boise, en Estados Unidos.

Hace 25 años que un grupo de dantzaris de Boise incorporó por primera vez los bailes del Korpus de Oñati a su vida vasca norteamericana. Desde entonces, esos bailes han adquirido caracter de tradición en Boise, y se bailan con toda solemnidad cada fin de julio, en la catedral de Boise, como parte de las fiestas vascas de la ciudad, que rinde así homenaje a San Ignacio de Loyola. Bailes y tradiciones que se originaron en Oñati adquieren así una nueva dimensión y son hoy, sin dejar de ser vascas, también norteamericanas. Con 25 años en la capital de Idaho, los bailes de San Ignacio --como muchos los conocen aquí-- han llegado a su mayoría de edad y son asumidos como propios por los habitantes, vascos o no, de esta ciudad norteamericana.

Como hace 25 años

Para conmemorar la efeméride [para datos más precisos, ver artículo en inglés de John Ysursa en la página web del grupo de danzas 'Oñati' de Boise], la edición de este año de la ya tradicional procesión y misa de San Ignacio en la Catedral de Boise --en la que los bailes del Korpus llegan aquí a su plenitud--, será especial. Al evento ha sido invitado el oñatiarra Txutxin Irizar, la persona que posiblemente más sabe de la celebración del Korpus en su villa nativa de Oñati. Como deferencia hacia él, los dantzaris boiseanos vestirán la tradicional vestimenta a la usanza de la villa guipuzcoana. Serán además los mismos dantzaris --muchos ya casados y con hijos-- que lo hicieran en 1980 (dantzaris más jóvenes han ido tomando desde entonces su relevo). Los nueve dantzaris originales fueron Chris Bieter, Dave Bieter, John Bieter, Julian Lete, Dave Baumann, Mark Echeverria, Dan Ansotegui, Ben Berriochoa y John Ysursa (capitán).

La procesión y misa en la catedral será a la hora acostumbrada. Los dantzaris y la imagen del santo llegarán en torno a las 18:45 a las escalinatas de la catedral, adonde les saldrá a recibir el obispo de Boise junto al capellán vasco aita Martxel. Los dantzaris bailarán frente a la catedral y se introducirán en ella escoltando a la imagen de San Inazio (sic) y la comitiva que les ha salido a recibir. Durante la misa, momento álgido en la consagración, con singular baile en el altar en honor al Santísimo. Durante la función religiosa cantará el coro Biotzetik, recién retornado de una gira por Euskal Herria.