Dokumentuaren akzioak
Bailando en Eibar bajo el sol
La 46 Euskal Jaia finaliza con el alarde de bailes al suelto que tuvo lugar ayer por la mañana en una soleadísima plaza de Untzaga
El festival dio comienzo al mediodía con el pasacalle que
los grupos realizaron desde Urkizu hasta Untzaga. Así, poco a poco, y
acompañados por el inconfundible sonido de los 'zanpanzar' y por la
melodía de las gaitas, los integrantes de Kezka Dantza Taldea, Xinglar
(Aragón), Rareca Antica (Calabria, Italia), Andra Mari (Galdakao),
Kikerics (Transilvania, Rumanía), Vezos Astures (Asturias) y La Bourrée
Gannatoise (Auvergne, Francia) alcanzaron el centro de Eibar bajo un
implacable sol primaveral. Este año la exhibición de danzas se realizó
en la plaza frente al Ayuntamiento debido a que hubo que realizar
cambios de ubicación de la carpa en previsión de la subida de categoría
del Eibar. Un cambio, por cierto, que no ha gustado nada a los
responsables de Kezka Dantza Taldea ya que consideran que este hecho
restó brillantez y público al acto. «El lugar bueno para hacer este tipo
de actos es en las gradas de la otra plaza. Para eso está, para que el
público esté sentado y vea todo bien y de forma cómoda. La ubicación de
hoy nos ha perjudicado completamente», afirmaron desde Kezka.
'Fandango' y 'arin-arin'
Los primeros en tomar parte fueron los locales de Kezka,
con una sola pareja bailando en el centro de la plaza. Rápidamente se
les unieron todos los alumnos de la escuela de Kezka en un 'fandango' y
un 'arin-arin' colectivo. Se vio de todo: algunos controlando muy bien
los pasos y otros haciendo lo que podían y mirando al compañero de al
lado para no perderse en el baile.
Los aragoneses de Xinglar trajeron dos muestras muy
diferentes de jotas: la pausada 'Jota de Ansó' y la 'Jota de Alcañiz',
ésta última con el tradicional arranque de esas tierras. Y entre ambas
una 'jotica' que recordaba en su letra «las notas bravas que tiene
nuestro canto regional». Sin pausa el festival continuaba con sus
diferentes ritmos: la tarantela de Rareca Antica sirvió de preludio para
las 'Danzas de Arratia' que bailaron los integrantes del grupo Andra
Mari de Galdakao. Para ese momento parte del público había emigrado
hacia zonas con sombra, mientras que otros se cubrían la cabeza con
pañuelos o paraguas. Pero todos con la firme intención de ver el
festival hasta el final.
Y de Galdakao a Transilvania. Las dos parejas de Kikerics
hicieron una demostración de su 'Danza de gitanos' así como de otros
bailes de las cercanías de Hungría, momento que fue muy aplaudido por el
público de Untzaga tras haber visto algo tan diferente. La gaita
asturiana del grupo Vezos Astures y los fuertes ritmos folk de La
Bourrée Gannatoise fueron los encargados de cerrar la XLVI Euskal Jaia.
Dokumentuaren akzioak