Ana Barrantes y Ion Estala: "Trabajamos mucho con piezas que se salen un poco de los límites establecidos"

Ana Barrantes y Ion Estala: "Trabajamos mucho con piezas que se salen un poco de los límites establecidos"

El festival LABO XL tiene como objetivo poner en valor las artes experimentales y dar oportunidades a artistas que, de otra manera, tienen más complicado acceder al circuito público. La tercera edición se celebrará esta misma semana y la jefa de producción, Ana Barrantes, y el director, Ion Estala, explican a este periódico más detalles acerca de esta fiesta de las artes vivas.

¿Qué es el festival LABO XL?

Ana Barrantes: LABO es un festival de nuevos lenguajes y nuevos espacios escénicos. Su objetivo es ser un festival donde las nuevas propuestas y los nuevos artistas que igual no tienen posibilidad de acercarse a Donostia de otra manera, tengan un nuevo espacio para mostrar sus piezas. El proyecto LABO nace en septiembre de 2017 de la mano de la compañía de danza y performance NODE buscando crear espacios abiertos donde diferentes propuestas tengan un lugar donde habitar.

Ion Estala: Esta edición estará más viva que nunca porque volvemos a salir. El año pasado sucedió todo dentro de los espacios de Kutxa Kultur en Tabakalera, y este año volvemos a la vida. Hay dos nuevas incorporaciones a la familia LABO, que son el espacio Emaús Social Factory, edificio colindante a Tabakalera, en el que tendremos un espacio en su azotea que no conoce el 100% de la ciudadanía. Y después iremos al Dabadaba, donde se celebrarán las últimas piezas del día en un ambiente más canalla. 

B: Sí. El festival se divide en dos partes. Por un lado, están las jornadas de la mañana que suceden en los espacios de Kutxa Kultur en Tabakalera, que están más enfocadas a actividades profesionales abiertas a la ciudadanía. Y por la tarde será el turno de los espectáculos que comienzan en Kutxa Kultur Plaza, en la cuarta planta de Tabakalera; después vamos a Kutxa Kultur Kluba, en la primera planta; acto seguido a la azotea de Emaús y finalmente a Dabadaba. Hemos querido diseñar un recorrido por espacios y artistas.

¿Con qué artistas contará el festival este año?

B: La programación de LABO XL da visibilidad a los artistas de nuestro territorio, siempre creando un puente hacia los artistas estatales. Contaremos con la creadora Paula Parra, que estrena su primera pieza como artista; desde Bilbao y Bélgica nos visitarán Olaia & Gilles; Macarena Recuerda Shepherd, que vienen de Bilbao y Barcelona; el donostiarra Igor Calonge; Viviseccionados, que es una compañía de Madrid; Batcharte dantza, desde Baiona; Pepa Cases, de Villareal; Melena Androide, que es una compañía de Alicante; la compañía Traspasarte de Madrid; los donostiarras Osa+Mujika; los madrileños No bautizados; la malagueña La chachi; y Bárbara Sánchez, desde Sevilla.

¿Cómo ha sido el proceso de selección?

B: La dirección artística abrió en mayo una convocatoria a creadores en la que durante un mes ofrecíamos la oportunidad de enviarnos sus propuestas. Desde la primera edición hasta la tercera ha ido subiendo progresivamente la cantidad de propuestas que hemos recibido y estamos súper contentas porque este año hemos llegado a 200. De todas ellas, han seleccionado los más acordes al festival.

¿Cuántos espectáculos hay en total?

B: Trece. Uno sucede el día de la inauguración a la mañana, el día 21 a las 12.00 horas en Kutxa Kultur Plaza, y los demás son todos por la tarde. Son cuatro por día, comienzan a las 17.30 horas y la última es a las 21.00 horas.

Han comentado que Paula Berra estrena su primera pieza. ¿Cómo es ese estreno?

E: Es una pieza de danza y performance en la que cuenta con otros dos artistas, Paula Montoya y Axier Iriarte. Es una pieza de 17 minutos que habla de las heridas y saber divertirse con ellas.

¿Es el único estreno absoluto?

E: Este año sí. Lo que sí hay son piezas que probablemente en Donostia todavía no hemos podido disfrutar, casi todas diría.

Por lo tanto, el festival ofrece una oportunidad para que ese tipo de actuaciones lleguen a un público y no se queden en casa.

E: Eso es. Es una oportunidad única para que los donostiarras puedan disfrutar y acceder a este tipo de propuestas que de otra manera sería muy difícil encontrar en la sociedad.

¿Qué tipo de artes experimentales tendrán el mayor protagonismo?

B: Sobre todo, la performance. Trabajamos mucho con piezas que se salen un poco de los límites establecidos y que trabajan las artes vivas.

De hecho, el año pasado el 'late motiv' era el movimiento, el cuerpo y el espacio. ¿Este año también?

E: Sí, nuestras bases siempre pivotan por tres conceptos: el movimiento, el cuerpo y el espacio. Este año, con la imagen del cartel hemos querido potenciar o hacer un guiño al rojo fuego, a la pasión que hay que tener para continuar después de todo lo que nos ha pasado y volver a la vida.

¿A qué público está dirigido el festival?

E: Es un festival abierto a todos los públicos, aunque igual sí que hay piezas que son más para adultos. Pero también hay momentos en los que cualquier persona de cualquier edad se puede acercar a ver cualquier pieza, sin ninguna duda. Por ejemplo, las actividades profesionales de las mañanas están abiertas a toda la ciudadanía. El viernes hay dos actividades. Por una parte, el tercer encuentro de festivales, que ya se generó en el festival LABO XL de 2019 y, por otra parte, una masterclass de Loránd János de la mano de Zinetika y Dantzagunea. El sábado tendremos otros dos encuentros. A través de ADDE Dan-tza se celebrará el encuentro Edadei, sobre el arte dramático y la danza; y también habrá un taller de movimiento de la mano de la creadora Pepa Cases que se titula La interpretación en la danza contemporánea. Estos talleres serán gratuitos bajo inscripción previa en info@labo.eus. También presentaremos una instalación llamada Acqua Alta que estará de lunes a sábado en Kutxa Kultur Plaza.

¿Cómo ha evolucionado el festival durante estos tres años?

B: El primer año comenzamos con mucha ilusión y muy emocionados. Tuvo mucho éxito y la gente salió súper contenta. Los artistas estaban felices de poder visitar Donostia y fue alucinante la magia que se creó entre ellos porque los festivales también sirven para los encuentros entre los profesionales. Cuando en el segundo año llegó la pandemia, creímos que había que luchar para que esto continuara y no dejarlo morir. Al final, luchamos para que esa segunda edición tuviera un lugar y lo tuvo de aquella manera, pero los artistas nos agradecieron mucho porque tuvieron la oportunidad de trabajar. Se pudieron generar tres jornadas continuas en Kutxa Kultur Plaza y fue un placer. Y este año ha sido un renacer y volver a darlo todo. La verdad es que LABO XL no deja indiferente a nadie.

¿Dónde se pueden conseguir las entradas?

B: Las entradas están ya a la venta en la página web de Billeto. Como todos los años, hay un abono de tres días por 35 euros. También hay una entrada de día que tiene un precio de 20 euros y se puede disfrutar de todos los espectáculos del día que se elija. Y la entrada básica, que sirve para ir a ver un solo espectáculo, cuesta diez euros. Esta última se puede adquirir media hora antes del comienzo de la pieza.