«Lur Sagar está compuesto por coreografías muy impactantes»

-¿Cómo es el espectáculo 'Lur Sagar'?

-Es muy ameno y dinámico. Se compone de tres piezas, tres coreografías diferentes realizadas por tres coreógrafos europeos. La primera de ellas es 'Jaar Eden', del francés Gael Domenger, la segunda se titula 'Songeurs', de Cristophe García, y la tercera y última es la que da título al espectáculo: 'Earth Apples' o lo que es lo mismo 'Lur sagarrak' que significa patatas. Esta última pieza ha sido creada por el reconocido maestro israelí Itzik Galili, y apoyado en la música de Mercedes Sosa, muestra una coreografía de una fisicalidad extrema. Pero los bailarines seleccionados por Dantzaz son de altísimo nivel y resuelven de una manera excelente las tres coreografías.

-Llevan ya un año con este espectáculo. ¿Cómo ha sido recibido?

-Ha tenido una respuesta muy positiva, tanto por el público como por la crítica. Son coreografías muy impactantes, y la gente se queda impresionada. Además de los típicos movimientos de los bailes clásicos y contemporáneos, también se realizan piruetas, giros por el suelo, e incluso se utilizan patatas en la última coreografía.

-Dantzaz es un centro de formación pero sale de gira como una compañía. ¿Cuál es su funcionamiento?

-Dantzaz es un centro de formación de altísimo nivel, de perfeccionamiento. Los bailarines se seleccionan en una audición, como si se tratara de una compañía, y se elige a los mejores. El nivel de la gente que se presenta es muy alto. Dantzaz es como una plataforma para los que quieren dar el salto a la profesionalidad, y comenzar a hacer audiciones para otras compañías. Además, el hecho de que salgamos de gira, ya les da a los alumnos la posibilidad de ponerse en los escenarios, por lo que luego llegan a las compañías profesionales con una mayor experiencia.

Talleres de improvisación

-¿Qué clases imparte en Dantzaz?

-Soy profesor de técnica clásica y de improvisación. Imparte los talleres de improvisación, que son muy importantes para los alumnos. Cuando se sueltan, y son capaces de improvisar, es cuando consiguen cosas muy buenas. A partir de esas improvisaciones surgen espectáculos que solemos representar en la Sala Club del Victoria Eugenia.

-¿Cómo ve el panorama actual de la danza en Euskadi?

-Hay movimiento, pero hace falta mucho dinero. La nuestra es una propuesta seria, de mucho nivel, y que puede conectar mucho con el público. Pero en el mundo de la danza se peca mucho de intelectualismo, que impide que llegue a la mayoría de la gente. A veces el público carece de códigos para descifrar lo que está viendo y frente a eso hay que hacer algo más accesible. Yo creo que si las compañías tomaran esto en cuenta, los espectáculos de danza tendrían una mayor demanda.