Dokumentuaren akzioak
A la coreografía desde la música
Crítica danza
Ek declara que su intención fue «crear una versión concertante, una lectura totalmente coreográfica de la música». No es así del todo, pues hay elementos que evidencian una interpretación externa a la música (los rábanos que aparecen en el segundo y tercer movimiento), y además Ek se autorreferencia en algunos de sus característicos gestos histriónicos y guiños sexuales. Pero se aprecia cómo el discurso coreográfico de Ek se va extrayendo de los recursos lingüísticos musicales que emplea Brahms.
Esto fue muy evidente en “Le Tableau Perdu” de Spuck, que, aunque
presenta una serie de incoherencias (habla del rococó francés y de
Watteau y luego escoge como música la “Sinfonía Italiana” de
Mendelssohn, de 1833), realiza una lectura casi prístina de la
partitura, organizando los grupos de bailarines en función del
contrapunto de los instrumentos y de sus evoluciones. El baile con
zapatillas de puntas, revisitando con capricho movimientos del ballet
clásico, y una expresividad un tanto frívola impregnan a “Le Tableau
Perdu” de un aura incómoda, pues uno tiene la sensación de estar
presenciando algo sin trascendencia. Seguramente era la intención del
autor. El Ballet de la Ópera Real de Suecia tiene buenos solistas, pero
el cuerpo de baile se mostró un tanto impreciso en ocasiones.
Dokumentuaren akzioak