La sesión arranca con un ejercicio de improvisación teatral. June, Iker, Maialen, Irati y el resto de sus compañeros salen a escena. “Teniendo el cuerpo y la música como bases, nos centramos en las necesidades e intereses de cada persona proponiendo dinámicas de desarrollo personal, para aprender y divertirse a través del juego”, explica Oihane Montejo, que dinamiza el programa Aretxabaletan Bertakoak Dantzan en el que participan adolescentes y jóvenes con diversidad funcional.

Detrás de estos talleres se encuentra el proyecto Bash dirigido a fomentar el bienestar, el disfrute y la socialización del citado colectivo, que a lo largo de este curso ha desembarcado en el municipio de la mano de Batera Aske Kooperatiba Elkartea, con el respaldo del Ayuntamiento.

Con el polideportivo Ibarra como punto de encuentro, y con una periodicidad quincenal –los sábados de 11.00 a 13.00 horas– se dan cita una decena de aretxabaletarras y jóvenes del entorno, que juegan a adivinar mímica, a coordinarse en bailes y a mover sus cuerpos. El lenguaje corporal permite sentir, expresar y comunicarse, siendo las manifestaciones más significativas el gesto, la postura, la mirada... e, incluso, la danza. El binomio de la creatividad y el movimiento cobra, de este modo, fuerza en este espacio lúdico en el que, tal y como señalan sus coordinadoras, “la inclusión es la clave”.

Esta primera experiencia ha dejado un buen sabor de boca. La intención es darle continuidad durante el próximo curso, siguiendo el ejemplo de otras localidades más veteranas en este programa como son Arrasate, Zarautz, Eibar y Elgoibar.