El baile gallego como asignatura obligatoria en A Estrada

Los talleres impartidos por Tequexetéldere se mantienen en los tres institutos y se introdujeron también este curso en los CEIP Pérez Viondi y Figueiroa

No hay mejor forma de mantener la tradición que empezar por la base. Es lo que ha hecho la agrupación municipal Tequexetéldere, que ha cerrado un acuerdo con los centros de enseñanza locales para introducir el baile tradicional gallego como un contenido más en la programación de la asignatura de Educación Física. La experiencia se probó con éxito hace tres años en los IES estradenses. Pese a las reticencias iniciales de algunos estudiantes -que por voluntad propia jamás se habrían apuntado a clases de baile- los talleres suelen terminar con un elevado porcentaje de participantes satisfechos.

Este curso el baile volverá a los horarios lectivos de los tres institutos estradenses por cuarto año consecutivo. Ayer comenzaron las clases en el IES Antón Losada Diéguez y en el Número 1 y hoy lo harán en el Manuel García Barros. Durante un mes, de las dos horas semanales de Educación Física, una se dedicará a los talleres de baile gallego, impartidos por el monitor Eduardo Rial, integrante de Tequexetéldere. En total se impartirán cuatro sesiones en las que el alumnado aprenderá algunos pasos básicos de baile tradicional gallego.

En el Antón Losada Diéguez, los talleres están dirigidos este curso a los alumnos de primero, tercero y cuarto de ESO y a los de primero de Bachillerato. En el Número 1 participan los alumnos de segundo, tercero y cuarto de ESO. En el García Barros, los de primero de Secundaria.

Este curso, además, los talleres de baile tradicional gallego se han llevado de forma experimental a dos colegios estradenses de Primaria. Durante el mes de octubre los alumnos de quinto y sexto curso del CEIP Pérez Viondi y del Figueiroa recibieron cuatro sesiones de baile tradicional gallego. Los talleres obtuvieron también en este nivel una buena respuesta.

Desde Tequexetéldere explican que, además de afianzar la cultura gallega, los talleres fomentan el conocimiento corporal, el equilibrio, la lateralidad, la segmentación corporal, la coordinación y control postural, la automatización de movimientos y la coordinación óculo-espacial. A mayores, los alumnos podrán arrancarse con una muiñeira o una jota en cualquier foliada.