El Paloteado acusa al ayuntamiento de “enterrar” las fiestas de Tudela

Los personajes de este acto satírico criticaron la limitación de horas de música en la calle

 Los personajes del acto escenificaron un entierro, con ataúd incluido dedicado a las fiestas, en el que anunciaron que, de repetirse esta limitación, las fiestas entonarán su Pobre de Mí al cuarto día, ya que en esta ocasión el cohete del día 24 tendrá lugar en viernes.

La satírica crítica del acto comenzó con el personaje del Diablo, encarnado por Carlos Martínez Lasheras, quien se disfrazó de sereno para anunciar en verso una hilarante serie de medidas prevista por el consistorio para las próximas fiestas para luchar contra el ruido. “Del cohete ya no se oirá el ‘pum’/ no vaya a ser que a alguien/ le vaya a dar un ‘patatús’. Los bueyes en el encierro/ cencerros no llevarán/ no vaya a ser que en la calle Peñuelas/ los vecinos se vayan a despertar. La bajada de los toros/ como van todos ‘cocidos’/ la desviaremos hacia el Eroski/ y allí acabará su recorrido. Y en la plaza de los Fueros/ las verbenas y conciertos/ para poderlos escuchar/ se llevarán cascos puestos”, dijo el Diablo, quien acusó a la concejalía de Festejos “de querer conseguir/ reducir días de fiestas/ con lo que a Salou vamos a tener que ir”.

El Diablo aprovechó para lanzar un mensaje al nuevo concejal de Festejos, Iñaki Magallón. “A raíz de los problemas/ que nuestras fiestas tuvieron/ peñas y sociedades/ para mejorarlas se unieron. A ver si Magallón/ escuchas a la comisión/ 7 días en un año/ merecen más atención”, explicó.
A las reclamaciones del Diablo también se unieron los personajes del Mayoral (Carlos Romano Ruano) y el Rabadán (Alberto Ramírez Laínez), quienes protagonizaron la parte teatral del acto junto al Ángel (Sandra Hernández Aranda), el Alcalde (Óscar Gracia Bozal), La Pepa (Laura Lamana Martínez), y el Tarambana (Adrián García Ruiz).

Por su parte, el grupo de Danzantes de San Juan se encargó de interpretar las piezas que se intercalaron durante un acto que reunió a cerca de un millar de personas en el parque Perrinche.

Alcalde, Rabadán, Mayoral y La Pepa, en plena discusión. blanca aldanondo