El Ballet Nacional suspende sus compromisos inmediatos

Los representantes del comité de empresa y tres directivos del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música (INAEM), organismo rector del Ballet, mantuvieron una reunión en la mañana de ayer de la que ha salido, como primera medida, la suspensión de las anunciadas funciones en Bilbao y Pamplona para el presente mes de mayo. Los bailarines, por medio de sus representantes en el comité de empresa, y a la vez portavoces designados, Raúl Tino y José Miguel Bau, ambos delsector clásico, han manifestado a este periódico su intención de intentar un diálogo con su director general, José Manuel Garrido, ya que mantienen que la directora del Ballet, María de Ávila, se niega a discutir con el conjunto de bailarines, de Garrido sólo han recibido una respuesta verbal a una carta de octubre de 1985.El director del INAEM no ha querido hacer declaraciones a este periódico, alegando, mediante un intermediario de su oficina de prensa, que el organismo se reafirma en sus decisiones de llevar adelante los expedientes disciplinarios. Los portavoces de los bailarines han declarado que hay una clara manipulación de lo sucedido en la RFA, ya que escenas parecidas se habían desarrollado en el último día de función en La Habana, en Sevilla y en el teatro de la Zarzuela de Madrid al terminar la temporada de diciembre pasado y nunca fueron requeridos o amonestados por tales demostraciones, que, alegan, son tradicionales de algunas compañías de ballet de Europa, y han recordado la última función del Ballet de Stuagart en el Palacio de los Deportes de Madrid hace dos temporadas.

Bromas mayores

Las bromas, según ellos, fueron mucho más lejos en esa ocasión. También han manifestado que el sector español hizo bromas aún mayores en la despedida de su gira en la Unión Soviética sin que nadie opinara nunca que eran constitutivas de falta profesional alguna. Los portavoces de los bailarines clásicos reclaman la dimisión de María de Ávila como directora, exigen una nueva dirección y culpan a la actual del caos de organización interna.Este desorden se pormenoriza, según la misma fuente, en la falta de continuidad en el profesorado, la necesidad de un diálogo con la dirección con respecto a los planes de la compañía y el respaldo para exigir aumentos de salario.

Actualmente la media de edad del Ballet Nacional Clásico es de 22-23 años, con un salario medio de 85.000 pesetas para el cuerpo de baile y 123.000 para los primeros bailarines.

Henry Brown, un bailarín del cuerpo de baile, ha expresado a este periódico que está en la compañía desde su fundación y que estuvieron dos años cobrando, en concepto de beca, un salario de 25.000 pesetas mensuales sin estar dados de alta en la Seguridad Social. Sin embargo afirma que actualmente están satisfechos con el convenio, con excepción del salario, y que con un cambio de dirección artística se podría comenzar a replantear el trabajo del conjunto, culpando en parte al INAEM por estar supeditado a las opiniones artísticas de María de Ávila y negarse a mantener un diálogo directo.

Fuentes del Ballet Nacional han dicho haber recibido una orden de la dirección del INAEM de no hacer declaraciones a la prensa, incluyendo en la prohibición a María de Ávila, aunque por su parte manifiestan que mantendrán el ritmo normal de trabajo. A última hora de la tarde se supo que la dirección del INAEM ha decidido cancelar los compromisos inmediatos para actuar en Bilbao y Pamplona, y se ha dejado también en suspenso la posterior temporada de verano. Asimismo, la oficina de prensa del INAEM ha hecho público un comunicado con los nombres de los implicados en los sucesos de la RFA. En dicho comunicado no se hace mención del otro suceso, que al parecer implica a dos bailarines del sector español que fueron sorprendidos por la policía italiana en el aeropuerto Marco Polo de Venecia con pequeñas cantidades de hachís, lo que provocó una retención de todo el pasaje del vuelo de más de dos horas, y que ya habrían recibido su comunicación de expediente.

Los expedientados por los sucesos de la RFA son: Javier Aramburu, Javier Serrano, Germán Cabrera, José Miguel Bau, Hans Tino, Rosana López, Alba Zamora, María José de Europa, Susana Ruiz, Carmen Molina, Marta Chafonté y Ann Freya Bass, quien ya ha abandonado la compañía con su esposo, John Prinz, uno de los actuales profesores. Las chicas fueron expedientadas por dejar su lugar en escena a los chicos.

La administración del Ballet Nacional también acusa directamente a dos miembros de la compañía -un bailarín clásico y un masajista- como presuntos autores del cartel de protesta contra María de Ávila descolgado la pasada semana en el teatro Monumental durante una función. Los bailarines no han aceptado los expedientes y se proponen iniciar una discusión directa con el INAEM.