Una 'ezpata-dantza' multitudinaria

La coincidencia de la fiesta en sábado ha hecho que el número de participantes vaya a ser notablemente superior al habitual. La posibilidad de contar con los componentes de Kezka que trabajan fuera de Eibar y aquellos estudiantes que ya han acabado los exámenes, hace que el grupo vaya a comparecer casi al completo.

Pero esta circunstancia no sólo se da entre los bailarines eibarreses. Cada año, la festividad de la Virgen de Arrate incluye a dantzaris de otras poblaciones que llegan como invitados, ocupan los puestos principales en los bailes, y culminan el día pasando a formar parte de la Cofradía de los dantzaris de Arrate. Eso les da la opción de seguir acudiendo para bailar junto al resto cada 8 de septiembre. En años anteriores no son muchos los que han podido acudir. Sin embargo, la coincidencia en fin de semana hará que los dantzaris fieles a la 'amatxo' de Arrate vayan a ser más que nunca mañana.

En total serán cerca de 60 dantzaris los que completarán la 'ezpata-dantza'. «Sabemos que en el siglo XIX se bailaba la 'ezpata-dantza' con grupos de 50, 60 e incluso más de 100» apunta Oier Araolaza desde Kezka. Por eso la cifra no es ningún récord pero sí que ha obligado a adaptar la coreografía. Así, en los bailes que se verán en la campa, por primera vez habrá dos capitanes elevados sobre las parrillas de espadas.

El grupo Kezka reconoce cada año el trabajo de algunos de los que impulsan la danza tradicional vasca día a día, invitándolos a tomar los puestos principales en el día de Arrate. Este año corresponderá ese papel a Soiartze Artetxe de Galdakao, Fernando Rojo de Tolosa y Xabier Etxabe. A su papel como dantzaris en sus respectivos grupos, se suma su trabajo en la investigación y el fomento de la danza tradicional desde distintos enfoques.

Durante esta semana se han sucedido los ensayos de los distintos bailes que se interpretarán mañana. La agenda de los dantzaris arrancará a las 11.00 horas con la Misa Mayor. En un momento de la misma, el grupo entra en el Santuario para ofrecer la 'ezpata-dantza'. Este baile se repetirá después durante el recorrido de la procesión, en la que los dantzaris acompañarán a la imagen de la Virgen hasta la Cruz. Finalmente, quienes quieran seguir disfrutando de las danzas podrán hacerlo en la campa donde se ofrecerá una exhibición con 'ezpata-dantza' y 'trokeo-dantza', que comenzará a las 12.30 horas.

Las fiestas de Arrate vivirán su día grande. Pero quienes quieran acercarse hoy al alto podrán disfrutar de distintos ingredientes que ofrecerán aperitivos de distinto tipo. El Santuario acogerá una misa y salve a las 18.00 horas. A continuación se voltearán las campanas para anunciar la fiesta. Mientras los miembros de las txosnas ultiman los preparativos, a las 19.00 está anunciada una exhibición de deporte rural. Los aficionados a los bertsos tienen una cita con la cena que organiza Eta Kitto! Euskara Elkartea en el restaurante Kantabria, en la que participan Sebastian Lizaso, Andoni Egaña, Beñat Gaztelumendia e Igor Elortza. Para los rockeros, la campa acogerá un concierto desde las 23.00 horas con los grupos Capsula, Matxura e Itaca Band. Después habrá juegos, fiesta de mojito y sangría y ambiente hasta la mañana. Habrá autobuses de bajada cada hora entre las 3.00 y las 8.00.

Ya el sábado 8, día de Arrate, habrá autobuses de forma continua entre las 9.00 y las 21.00 horas, y desde esa hora uno de bajada cada hora hasta las 3.00, al precio de 2 euros. Pero quienes quieran subir andando tienen cita a las 10.00 para subir desde Azitain por el camino de los Pasos de la Virgen. No faltará el reparto de caldo, chorizo y vino en la fuente de Zestero. El Santuario acogerá la Misa Mayor a las 11.00, en una jornada que contará con actuaciones de bertsolaris y trikitilaris, concurso de baile al suelto e incluso un torneo de hiru txirlo.

El ambiente musical de la tarde se concentrará en las txosnas de la campa, donde el grupo Kupela iniciará la romería a las 18.30 horas. El relevo llegará de mano de los eibarreses Emepebost que ofrecerán su verbena desde las 22.00 horas, en una noche de sábado que promete ser larga.