Lucía Lacarra se muestra "dolida" por la cancelación de sus actuaciones

La artista exhibe su "tristeza" por no bailar el 3 y el 4 de agosto en el Kursaal

La artista remitió un comunicado desde su domicilio en Munich para declararse "una perjudicada más". "Por respeto" a su público, sentía la necesidad de pedir "disculpas" por las molestias derivadas de una suspensión que, según recalcó, ha sido "unilateral" y por causas ajenas a su voluntad. Tras su lesión del pasado año, "estaba deseosa" de volver a bailar ante el público de su país. "Lamentablemente, la mala gestión de los espectáculos ha impedido dicho hecho", reza el comunicado.

"Me encuentro fatal, muy dolida, y ha sido artísticamente un insulto, una falta de respuesta y una vergüenza cómo nos han tratado", declaró ayer Lacarra a este diario en una conversación telefónica. Según recordó, el domingo llamó a la promotora para pedir los billetes de avión, ya que mañana tenían previsto viajar de Alemania a Gijón para la primera función. "Como respuesta me enviaron un mensaje que decía que por problemas de la crisis la venta de entradas no estaba siendo buena y que iban a cancelar", aseguró, para añadir que, aunque "le echan la culpa a la economía, tampoco se ha hecho mucha publicidad del montaje, algo que es responsabilidad de la promotora".

Lacarra, que participaba en el proyecto como bailarina contratada, tenía "una ilusión enorme" por este trabajo que suponía su regreso a los escenarios vascos tras su lesión del año pasado. "Soy muy profesional. He trabajado duro para volver a estar en forma y hemos ensayado mucho. No me importa el dinero que deje de ganar porque actuar para el público de San Sebastián era algo personal, suponía quitarme la espinita. Lo siento muchísimo", lamentó.

la empresa La bailarina guipuzcoana dice no querer saber nada de Arts & Events, la empresa afincada en Barcelona que también promovió sus espectáculos de Pink Floyd y Duke Ellington. Su responsable, Ada Casanovas, vincula la cancelación con "un problema económico" y con la escasa venta de entradas.

"El montaje tiene un gran presupuesto porque todos los bailarines son de primer nivel. Creímos que iba a ser un éxito y que iba a funcionar, pero por desgracia la taquilla no ha ido bien y yo no iba a poder asumir el gasto", declaró Casanovas a este rotativo. También aseguró que si decidió no invertir lo necesario en publicidad fue por no meterse en más gastos una vez que vio que la taquilla no respondía. "Sé que Lucía está muy enfadada. La cancelación es una pena enorme porque el espectáculo es maravilloso. Asumo mi responsabilidad, pero a mí el dinero no me cae del cielo", concluyó.

Lucia Lacarra (EFE)