Los ezpatadantzaris invaden Garai

Dieciséis grupos de Durangaldea participan en el día del baile tradicional

Dieciséis grupos de la zona tomaron parte en este acontecimiento que ya se ha convertido en toda una tradición. Dos grupos de Garai, otros dos de Abadiño, Talde Batuak e Iluntze; cuatro de Berriz, tres de Iremiñe y uno de San Lorenzo; cuatro agrupaciones de Iurreta, y una de Durango, Izurtza, Mañaria y Otxandio fueron las que quisieron unirse a esta fiesta de la dantza, más concretamente, de la ezpatadantza. En total, fueron 128 los ezpatadantzaris los que se dieron cita en las calles de Garai y demostraron sus habilidades para esta modalidad de baile típica de la zona.

Además, como para poder bailar es imprescindible que la música haga acto de presencia, en la fiesta también participaron txistularis, tamborileros y demás ayudantes de los grandes protagonistas del día. Por tanto, alrededor de 200 artistas invadieron el municipio. Para que la fiesta fuera completa, era necesaria la participación del público, que tampoco faltó a su cita anual con el Ezpatadantzari Eguna. La presencia de cientos de espectadores sirvió para convertir Garai en un escenario rebosante de alegría, ambiente festivo y folklore euskaldun.

Los actos arrancaron a las 18.30 horas, momento en el que se inició un pasacalles que recorrió el municipio para hacer llegar el sonido de la música y la felicidad a todos los rincones del lugar.

Acto seguido, pasadas las 19.00 horas, dio comienzo la actividad más esperada del día, el momento clave para los 128 ezpatadantzaris y todos sus ayudantes, puesto que tuvo lugar la exhibición de bailes.

En primer lugar, los protagonistas bailaron el Dantzari Dantza, que se compone de nueve bailes distintos. Agintariena, Zortzinangoa, Ezpata joku txikia, Banangoa, Ezpata joku nagusia, Binangoa, Launangoa, Makil jokua y Txotxongiloa fueron, en ese orden, los bailes que interpretaron los ezpatadantzaris. Después, bailaron el tradicional Aurresku y, para terminar, hicieron lo propio con las erregelak.

Hasta la madrugada De todos modos, la fiesta de la ezpatadantza se alargó hasta la madrugada. Y es que a las 21.30 horas se unieron para recuperar las energías gastadas disfrutando de una cena popular. Después, como no podía ser de otra forma, arrancó una romería a las 23.00 horas que invitó a los dantzaris a hacer lo que más les gusta, pasar un buen rato moviendo el esqueleto.

A finales del siglo XIX, la ezpatadantza sólo se practicaba en seis localidades de Durangaldea, en Iurreta, Garai, Berriz, Abadiño, Izurtza y Mañaria. Después, en el siglo XX, tuvo un resurgimiento de la mano de Euzko Gaztedi, pero en la década de los 60 estos bailes se encontraron a punto de desaparecer. Por ello, la asociación Gerediaga comenzó a realizar un trabajo de recuperación con los grupos de dantza de los pueblos. De ese modo, en 1967, se organizó por primera vez el Ezpatadantzari Eguna de la Merindad, que en esa ocasión se celebró en Iurreta. Desde entonces, esta fiesta se celebra cada año en un municipio diferente, siendo un día especial para todos aquellos grupos de dantza de la comarca.

Garai acogió en la tarde de ayer la trigésimo novena edición del Espatadantzari Eguna de Durangaldea, fiesta en la que participaron mas de cien ezpatadantzaris de la zona (J.B.)