Los caldereros toman las calles de Pamplona

Más de 50 personas disfrazadas de zíngaros y zíngaras anunciaron ayer en numerosas calles de la capital la llegada de los carnavales al son de panderetas, castañuelas, cascabeles, tambores y acordeones

El cortejo de caldereros partió a las 12.00 horas de la calle San Lorenzo y recorrió la calle Mayor, San Saturnino, la plaza del Ayuntamiento, Mercaderes y Curia. El desfile terminó en la plaza San José, donde la fiesta se prolongó hasta las 14.00 horas con alardes de cada uno de los grupos que intervinieron en la comitiva.

Primero fue el turno de los dantzaris más veteranos, que ataviados con trajes gitanos interpretaron obras tradicionales con arreglos al estilo gitano y otros temas compuestos especialmente para esta ocasión. Luego, los gigantes de fuego de San Jorge hicieron lo propio mientras de sus hombros se desprendían chispas de fuego. Siguieron los zaldikos y los infantes de Huarte, ambos acompañados de gaiteros y la fanfarre.

Iruña Taldea y Aldezar organizaron el desfile de caldereros con la colaboración de los gaiteros de Pamplona, los dantzaris de San Lorenzo, dos porteadores de San Jorge que llevaron los gigantes de fuego, la fanfarre y los infanticos de Huarte, que repitieron. "Todos los años solemos participar los mismos grupos, aunque no está cerrado a que lo haga más gente, algo que, de hecho, nos vendría bien", afirmó Ekaitz Santacilia, de Iruña Taldea.

La fiesta continuó por la tarde con una kalejira de caldereros por Navarrería, Mercaderes, Ayuntamiento, San Saturnino, Mayor, Eslava, plaza San Francisco y calle Jarauta. En la última plaza citada del recorrido tuvo lugar la tradicional boda zíngara entre los barrios.

barrios Por otro lado, las asociaciones infantiles y juveniles de los barrios de San Jorge, Rochapea y Casco Viejo celebraron la undécima edición de esta fiesta de caldereros previa a los carnavales. La cita, que se desarrolló en los tres barrios mencionados, contó con dos bodas de hermanamiento entre vecinos y una comida en las piscinas de la Rochapea.

Un niño de la Federación Batean de la Rochapea tomó la mano de una niña de la asociación Umetxea de San Jorge ayer en la plaza Sanduzelai a las 11.30 horas en la celebración de la boda simbólica infantil. El acto contó con la colaboración del Colectivo de Animación Infantil Adardunak y los grupos de danzas txikis de los dos barrios. Después de la ceremonia infantil todos los participantes bailaron danzas de caldereros y compartieron rosquillas de boda.

Tres horas más tarde, los caldereros del Casco Viejo presentaron al novio y los de la Rochapea a la novia de la boda joven en el patio del centro comunitario La Carbonilla de la Rochapea. Por la tarde, partió del Parque de los Enamorados otro cortejo calderero que llegó al Ayuntamiento a las 18.00 horas, donde recogieron a la futura esposa. La ceremonia se ofició en la plaza de San Francisco. El sonido de los cascabeles cosidos en los atuendos gitanos se prolongó hasta el anochecer.

Un grupo de dantzaris, en la plaza San José al finalizar el recorrido del cortejo calderero.