Fotos del baile de la bandera en fiestas de RoncalIban Aguinaga
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Fiestas de Roncal | Bandera y tradición al compás del viento
El día grande de las fiestas de Roncal ha estado protagonizado por Aritz Jamar, joven que ha interpretado el baile de la bandera
El día grande de las fiestas de Roncal se ha celebrado por todo lo alto. Y es que su típico baile ha hecho que la bandera sobrevuele y se luzca por los cuatro vientos. El portador de esta y el resto de sus compañeros han protagonizado el momento más emblemático de todas las fiestas. Elevar la bandera en honor a todo un pueblo y a una virgen, la Virgen del Castillo.
Como todos los años, el baile de la bandera ha reunido a personas de todos los lugares y todas las edades. Previo a este baile, se ha realizado la misa solemne que ha tenido lugar en la Parroquia de San Esteban, el punto más alto del pueblo. Cuando esta ha finalizado, todo el pueblo ha ido escaleras abajo, efectuando la tradicional bajada de la bandera. Mientras los vecinos descendían las empinadas cuestas, sus nervios han ido floreciendo hasta que han llegado a la plaza situada enfrente del Ayuntamiento de Roncal.
Ha sido aquí donde Aritz Jamar, portador de la bandera, ha realizado su baile acompañado por la quinta que cumple la mayoría de edad este año. Los txistus han empezado a sonar. Es la señal para que Jamar inicie su interpretación. Las cosas así, el joven se ha colocado en mitad del escenario y en cuestión de segundos, una plaza abarrotada se ha convertido en un lugar donde el silencio reinaba. Solo importaban Jamar y su bandera. Los txistus han dado compás a los movimientos dirigidos por el joven, que ha ido adaptándose al viento que soplaba por la zona.
Aritz Jamar, roncalés de 28 años, ha declarado que el viento ha sido un complemento extra del momento. “Ha sido el año más complicado porque hacía viento y al ondearla se podía enrollar”. Aun así, la fuerza y la práctica han hecho que todo el pueblo pudiera disfrutar de un acto de “muy alto nivel”. Este joven ha comentado que ya tenía la técnica aprendida porque “son pasos concretos y no varían mucho”. Además, con el ritmo de la música ya ha comprendido cómo tenía que girar la tela.
Jamar empezó a practicar este baile cuando tenía 20 años, aunque durante este tiempo se ha ido alternando con Julen Garjón, otro joven de la localidad. “Un año lo hace uno y al siguiente, otro”. El día grande de las fiestas no es la única ocasión en la que interpretan esta danza, ya que “en el Día del Queso del Roncal también se baila”. No obstante, siempre es un orgullo para él hacer este baile. “Es un momento muy sentimental, son dos minutos en silencio en los que solo se escucha la música y los movimientos de la bandera”. El portador se ha alegrado mucho de que toda su cuadrilla y familia presenciaran el acto, aunque también hubiese otros que “seguían en la cama”, ha bromeado.
Baile del Ttun-Ttun
A la par de Aritz Jamar se encontraban los jóvenes que iban a bailar en este día tan especial. Este año los protagonistas han sido David Alzu, Naroa Arias, Sergio Arranz, Nahia Artutx, Markel Baines, Eneko Erviti, June Gárate, Iraia García, Julia López y Peio Oteiza. Estos jóvenes, que han cumplido o van a cumplir los dieciocho años, han llevado puesto el traje tradicional del pueblo. Y ellos también han sido las personas que, tras el baile de la bandera, han interpretado la danza clásica de la zona, el Baile del Ttun-Ttun.
June Gárate, roncalesa de 18 años, se encontraba muy feliz tras haber bailado. “Tenía muchas ganas de este día, se baila todos los años, pero te toca solo una vez en la vida”. Pese a que sea un baile conocido por todo el pueblo, una semana antes de las fiestas se reúnen para practicar. “Ensayamos todos juntos, nos ponemos en parejas y practicamos”. Aún estando un poco nerviosos, ha admitido que estaban "muy ilusionados”. Un tiempo agradable ha hecho que no hayan pasado tanto calor “como en otros años”, aunque seguramente que "luego pasaremos más”, ha aclarado con una sonrisa. Esta decena de jóvenes, que han bailado por parejas, no han sido los únicos que han salido a la mitad de la plaza. Poco a poco, el resto de vecinos se han ido animando para participar en esta tradicional danza en corro.
Fiestas reivindicativas
Por su lado, la alcaldesa de Roncal, Amparo Viñuales, ha mencionado que las de este año son unas fiestas inclusivas, en contra de la guerra y la violencia de cualquier tipo. Por ejemplo, ha sido la primera ocasión en la que una joven ha realizado la bajada de la bandera. Sobre el 15 de agosto, el día grande, ha señalado que es una fecha más familiar y simbólica. “Es un homenaje no sólo al Ayuntamiento, sino a todo el pueblo”.
Asimismo, ha declarado que ver a tanta gente joven en el pueblo “es un auténtico gusto”, aunque no se trate de personas que vivan habitualmente en el municipio. “Estos días el pueblo está más vivo que nunca, todas las casas están abiertas”. Muchos de ellos no viven a diario en Roncal, pero “sienten las fiestas como parte de ellos, porque ellos también son de aquí”.
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