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El público vibró y sudó en el Festival de Folclore
Haritz y los grupos de Argentina y Siberia ofrecieron un gran espectáculo El polideportivo fue un horno
El sofocón
no impidió a los espectadores disfrutar de un espectáculo variopinto.
Haritz interpretó el Baile de la Era, pieza proveniente de la zona de
Lizarra que el grupo elgoibarrés baila al modo tradicional,ofreciendo
en la segunda parte de su actuación danzas guipuzcoanas.
La compañía de Kamchatka ofreció un espectáculo marcado por la naturaleza siberiana. Los sonidos de las gaviotas y otros animales producidos por las privilegiadas gargantas de los jóvenes bailarines siberianos, una partida de caza o una divertida ceremonia del te fueron parte de una actuación en la que los instrumentos musicales tuvieron una presencia mínima. Por su parte, el Gran Ballet Argentino inundó el polideportivo con los ecos melancólicos del tango. El ambiente decadente de un lupanar, se completó con la actuación de un cantante que supo hacerse acompañar por el público elgoibarrés en la interpretación de dos conocidos tangos, y una exhibición de baile, casi acrobática. Luego llegó el turno de las danzas de raíces gauchas, con un baile de ronda en el que los vigorosos vaqueros de la Pampa buscaban el favor de las mujeres. Su actuación se cerró con un vibrante baile de zapateado que hizo vibrar al polideportivo elgoibarrés.
La compañía de Kamchatka ofreció un espectáculo marcado por la naturaleza siberiana. Los sonidos de las gaviotas y otros animales producidos por las privilegiadas gargantas de los jóvenes bailarines siberianos, una partida de caza o una divertida ceremonia del te fueron parte de una actuación en la que los instrumentos musicales tuvieron una presencia mínima. Por su parte, el Gran Ballet Argentino inundó el polideportivo con los ecos melancólicos del tango. El ambiente decadente de un lupanar, se completó con la actuación de un cantante que supo hacerse acompañar por el público elgoibarrés en la interpretación de dos conocidos tangos, y una exhibición de baile, casi acrobática. Luego llegó el turno de las danzas de raíces gauchas, con un baile de ronda en el que los vigorosos vaqueros de la Pampa buscaban el favor de las mujeres. Su actuación se cerró con un vibrante baile de zapateado que hizo vibrar al polideportivo elgoibarrés.
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