Ballets Olaeta lleva su legado a casa

nació a partir del grupo de danzas Elai-Alai de Gernika-Lumo y por eso la apertura en la villa de la muestra con gran parte del fondo patrimonial que ha ido amasando a lo largo de más de setenta años representa simbólicamente la vuelta al hogar de los Ballets Olaeta.

Este legado, que la afamada entidad donó a la Diputación Foral de Bizkaia hace dos años, ha estado expuesto con anterioridad en la sala Ondare de Bilbao y en el Museo Vasco de Baiona, pero su llegada al Museo Euskal Herria de la villa foral ha supuesto una alegría para la familia Olaeta ya que "siempre hemos querido dar todo el fruto del trabajo a Gernika", reconoció Lourdes Olaeta.

La hija de Segundo Olaeta, creador de Elai Alai y de Ballets Olaeta, acudió a la presentación de la muestra el viernes acompañada de sus hermanos Miren Tere y Javier y se mostró emocionada porque "hemos luchado mucho y ahora se recogen los frutos, ya que el trabajo de nuestro padre ha sido poco valorado", recordó.

La exposición acapara casi todas las plantas del museo, con una selección de un centenar de elementos que incluyen fotografías, vídeos, instrumentos musicales, carteles, ropas y complementos. "Habrá una veintena de trajes de todo tipo, aunque donamos más de 700 que están recogidos y catalogados en el museo Etnográfico de Bilbao", desvela Olaeta.

vivencias históricas

De Iparralde a América

Un centenar de personas se acercaron al acto inaugural, en el que no faltaron varios de los integrantes de aquel primer Elai-Alai -como Crucita Etxabe, Celes Arrien o Cecilia Mintegia- que la Guerra Civil empujó al exilio. Fue allí, en Iparralde, cuando se creó el grupo Oldarra y con el tiempo, en 1949, surgió el grupo Ballets Olaeta, que actuó por primera vez en el Liceo Guerniqués, luego en el teatro Lope de Vega de Madrid y así hasta 60 años más de actuaciones por todo el mundo. "Han sufrido y gozado con el devenir de Euskal Herria, han vivido éxitos e injustificables odios", resumió la Diputada de Cultura Josune Ariztondo en un texto que se leyó durante el acto.

En la muestra también ocupaban el protagonismo que merecían Víctor y Lide Olaeta, vástagos de Segundo, ya fallecidos, que tuvieron también una gran importancia en el desarrollo del histórico grupo. "Si aita recogió el folclore, Víctor desarrolló el ballet", desveló Lourdes.

La mayor parte de los elementos expositivos se encuentran en el ático del museo, donde hay dos pantallas táctiles para descubrir fotografías, documentos, partituras, carteles, y la descripción de cada tipo de baile realizado por los Ballets Olaeta. Además, tres auriculares dan la opción de escuchar 12 composiciones utilizadas en sus actuaciones y de seguir su partitura mediante una pantalla.

A lo largo de todo el museo, incluyendo los descansillos de sus majestuosas escaleras, muestras de vestuario utilizado por los bailarines, como tutús de ballet clásico, ropas de danzas vascas o calzado de todo tipo salpican de colorido los rincones.

Por otro lado, en la planta baja, se podrán ver cuatro cortos relacionados con distintas etapas de la historia de los Ballets Olaeta, desde los inicios en Gernika pasando por el exilio, la academia y las giras por América-. En el aula didáctica se llevarán a cabo talleres y se ha instalado una pequeña academia de ballet. Finalmente, varios paneles y vitrinas recordarán a la relación de la familia con Gernika-Lumo. Su lugar de nacimiento y al que han vuelto para mostrar su obra.