Baile de espaldas en la Asunción

La iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción acogerá mañana la tradicional ezpatadantza que precederá a la misa mayor

El baile precederá a la misa mayor. Posteriormente, a las 12.15 horas tendrá lugar el aurresku de honor, en la plaza de Euskadi. Un año más los zumarragatarras seguirán fieles a su tradición de celebrar la festividad de Nuestra Señora.



Como viene sucediendo, los miembros del grupo de danzas Irrintzi serán los encargados de interpretar los citados bailes.



La ezpatadantza del 15 de agosto en la iglesia parroquial, que hasta hace unos años tuvo la misma importancia que la del 2 de julio en La Antigua, iniciará sus prolegómenos en los bajos del Ayuntamiento, donde concentrados txistularis, dantzaris y autoridades, se dirigirán en comitiva hasta la iglesia parroquial Ntra. Sra. de la Asunción, donde antes de comenzar la ceremonia litúrgica se interpretará la danza. Finalizado el baile, los dantzaris abandonarán el templo y dará comienzo la misa mayor.



Aurresku en la plaza



Terminado el acto religioso, los dantzaris y txistularis acompañarán a las autoridades al Ayuntamiento, lugar desde el que presidirán el aurresku de honor, que se interpretará en la plaza de Euskadi.



Cabe recordar que hasta hace unos años, concretamente hasta 1972, las fiestas patronales de Zumarraga se celebraban a mediados de agosto.



El origen de las éstas se debe al cambio de sede parroquial acontecido en 1576. Hasta entonces, el santuario de Santa María de Zumarraga, La Antigua, había sido la iglesia parroquial de la localidad y en consecuencia las fiestas se celebraban en julio.



Con la ubicación de la parroquia en el valle, las fiestas se trasladaron al mes de agosto en honor a la Virgen de la Asunción, fecha vigente hasta los años 70, cuando de nuevo se optó por ubicar las fiestas de Zumarraga en el mes de julio.



Procesión de San Roque



Otro de los actos que antaño se celebraba a mediados de agosto era la procesión de San Roque, que tenía lugar el día 16. Al igual que el día anterior, las autoridades, precedidas de dantzaris y txistularis, se dirigían a la parroquia, para, a continuación, con la imagen de San Roque, hacer una procesión que se iniciaba por la puerta lateral del templo, bajaba por los números impares de la calle Piedad, torcía la altura del edificio del Itzalon, y subía por los números pares de la calle, entrando en la iglesia por la puerta principal».