Arteleku prepara su mudanza

El centro repartirá su actividad entre errenteria y el convento de Santa Teresa

La panificadora Lekuona de Errenteria se convertirá en 2015 en sede de Dantzagunea, el centro de recursos para la danza de la Diputación de Gipuzkoa actualmente ubicado en las instalaciones de Arteleku, en el barrio donostiarra de Txomin-Enea. En breve, tal vez antes de finales de año, el Ayuntamiento realizará reformas urbanísticas en la zona para atajar las frecuentes inundaciones, por lo que Arteleku, que en 2011 sufrió el devastador efecto de una riada, será derribado y deberá abandonar su habitual emplazamiento. De esa manera, la antigua fábrica de Errenteria acogerá un centro dedicado a la danza, la cultura y la creación, mientras que el resto de servicios de Arteleku, según confirmaron fuentes de la Diputación, se trasladarán previsiblemente al convento de Santa Teresa, que ahora cumple las veces de almacén de los fondos de San Telmo.

"Arteleku seguirá como hasta ahora y no perderá su esencia, solamente cambiará de lugar", aseguró la diputada de Cultura, Ikerne Badiola, que confió en que "se abrirán nuevas posibilidades para el centro, que se situará más cerca de los ciudadanos y permitirá que se den nuevas dinámicas". En su visita a Errenteria, Badiola estuvo ayer acompañada, entre otras personas, por el alcalde de la localidad, Julen Mendoza; la directora foral de Cultura, Garazi López de Etxezarreta; la responsable de Tabakalera, Ane Rodríguez; el responsable de proyectos de Donostia 2016, Igor Otxoa, y el concejal de Urbanismo, Luis María Díez Gabilondo. También participaron en el acto profesionales del ámbito de la cultura y representantes de agrupaciones con sede en la localidad.

Pese a que era la primera vez que la Diputación confirmaba que Arteleku abandonará su sede de Txomin, la cita de ayer versó exclusivamente sobre los usos que tendrá en el futuro la antigua panificadora Lekuona, el último edificio industrial de Errenteria junto a la papelera. Desde que en 2006 la empresa trasladó su actividad al polígono de Masti Loidi, las instalaciones del viejo complejo, ubicado junto al río en el centro del pueblo y con un espacio de 3.500 metros cuadrados, se encuentran abandonadas y en desuso, pero este mismo año comenzarán las obras, financiadas por el ente foral y el Consistorio errenteriarra, para llevar allí Dantzagunea y crear diversos espacios para la creación orientados a la danza, las artes escénicas y la expresión corporal.

El proyecto, afirmó Badiola, permitirá "ampliar los servicios y recursos" actuales de Dantzagunea en un espacio "mayor, mejor comunicado e integrado en una ciudad en la que existe un tejido cultural muy importante en torno a la danza". "No es casualidad que la localidad elegida sea Errenteria", afirmó la diputada, en alusión a un municipio que ha sido vivero de compañías como Deja Vu o Kukai, cuyo director, el bailarín Jon Maya, estuvo también presente en la rueda de prensa de ayer.

Participación El proceso, según aclaró Ikerne Badiola, tendrá un carácter participativo, pues se abrirá a la ciudadanía y a los diversos agentes culturales para que puedan definir necesidades concretas en cuanto a usos y espacios, además de aportar ideas para determinar el proyecto cultural.

La Diputación prevé que las obras culminen en 2015 y mientras tanto se habilitarán espacios en el centro cultural Niessen para albergar de manera provisional Dantzagunea. A tal efecto, el ente foral y el Ayuntamiento aportarán 400.000 euros a partes iguales.

La diputada recordó que Errenteria es "una de las zonas más deprimidas" de Gipuzkoa en términos socioeconómicos y también "una de las más pobladas". Por eso, consideró que el proyecto de Lekuona "ayudará a regenerar" la comarca y permitirá "seguir vertebrando el territorio a través de la cultura".

Badiola destacó el compromiso de la Diputación "con la creación cultural y artística", aspecto al que se dedicará cerca del 70% del presupuesto del departamento de Cultura.