La obra se enmarca en EL 250º ANIVERSARIO DEl NACIMIENTO del célebre compositor. Todavía quedan entradas para asistir, a las 20.00 horas en el Kursaal, al último pase de esta representación de danza

Hasta que este día llegue, el prestigioso bailarín Angel Corella sigue consumiendo energías sobre el escenario. Su último espectáculo de danza, en el que participa un amplio elenco de solistas del American Ballet, se podrá ver hoy a las 20.00 horas por segunda vez en el Kursaal tras la primera representación de ayer, y para la cual aún quedan entradas.

La representación, que dura una hora y 45 minutos, está formada por dos partes en las que se ejecutarán coreografías de Christopher Wheeldon, Georde Bizkarde, Margarita Fernández, Stanton Welch y Marius Papa. La velada comienza con un monográfico dedicado a Mozart en el 250º aniversario de su nacimiento y se presentarán coreografías creadas sobre composiciones del genio de Salzburgo.

La segunda parte estará compuesta por la suite de El Corsario , célebre ballet basado en un romance del poeta inglés Lord Byron. Se trata de un romance trágico y exótico en el que el protagonista Conrad aparece retratado como una mezcla entre héroe y bandido despiadado cuya forma de vida le ha llevado a perder los sentimientos de humanidad y su única salvación es el amor que siente por una esclava llamada Medora. El Corsario cuenta con la participación de bailarinas del Joven Ballet de Cataluña.

Corella interpreta el papel de esclavo. El bailarín madrileño confesó, en la rueda de prensa celebrada ayer en Donostia, la dificultad que supone interpretar ese personaje. "El rol de esclavo es uno de los más difíciles, transmitir a través de la danza la personalidad atrapada bajo las órdenes de su amo cuesta mucho trabajo", relató Corella.

El célebre bailarín admitió la dificultad que supuso para él realizar las coreografías de Mozart. "Sus composiciones son realmente complejas pero bailarlos es todo un lujo. Te dan energía y empuje para continuar, hay un momento en el que la música decae y luego vuelve a recobrar fuerza. La música te va empujando. Lo difícil es jugar con la música porque cambia constantemente", ensalzó el bailarín. Éste explicó que "cada pieza del monográfico está acorde con momentos de la vida de Mozart".

A sus 31 años, Ángel Corella ha bailado todos los roles de los ballets clásicos. Su proyección internacional es interminable y es estrella invitada del Royal Ballet de Londres, del Ballet de La Escala de Milán, del Ballet de Australia y del Ballet de Tokio, entre otros.

Tras su larga e intensa carrera por todos los escenarios internacionales, confesó que se encuentra en un momento en el que el nivel técnico y artístico están nivelados". "Es increíble poder experimentar los cambios físicos y técnicos durante la carrera, sé que a los 38 años mi nivel artístico será altísimo, pero mi cuerpo no aguantará esa exigencia artística y técnica", aseguró el artista madrileño