3.500 dantzaris exhiben en Basauri el repertorio tradicional

Los bailes más típicos de Euskadi y Navarra congregaron a 6.000 espectadores en el polideportivo Artunduaga

El campo de fútbol del polideportivo Artunduaga de Basauri fue el escenario elegido por la Euskal Dantzarien Biltzarra, organizadora del evento, para que los más de 3.500 participantes realizaran una completa exhibición. El público presente -alrededor de 6.000 personas- disfrutó de un completo espectáculo, compuesto por una treintena de los bailes más tradicionales de Euskadi y Navarra.



La 'dantzari dantza', que reúne nueve piezas de la comarca de Duranguesado, fue elegida para abrir el programa. «Este año contamos con el conjunto autóctono San Lorenzo de Berriz, donde nació este baile que gusta mucho por su espectacularidad», explicó Jon Gaminde, miembro de la organización.



El repertorio continuó con los alardes guipuzcoanos adaptados a las mujeres como el 'agurra', 'aboastitzea' y la 'azinta dantza'. Las danzas del ciego como la 'jota' o el 'cuatro calles' y las mixtas, con arcos y cintas, precedieron a las infantiles. Estas últimas fueron muy más esperadas, ya que congregaron a cerca de un millar de niños sobre el césped.



Actuación retirada



La 'kaixarranka', baile típico de los pescadores de Lekeitio, arrancó a su vez los mayores aplausos del graderío. El públio, agradecido, disfrutó de los pasos que los dantzaris ofrecían sobre las cajas de madera que, bajo un sol de justicia, varios hombres sujetaban en lo alto.



La 'larrain dantza', con la que se esperaba reunir a más de 2.000 aficionados y poner el broche de oro a la mañana, finalmente fue retirada de la lista de actuaciones, lo que en cierto modo decepcionó a los participantes. «Es una pena, pero Juegos y Espectáculos no nos ha permitido concentrar a tanta gente en el campo de fútbol porque dicen que no tiene capacidad», lamentó Iñaki Irigoien, de la Euskal Dantzarien Biltzarra.



Y es que los promotores de esta iniciativa aseguran que cada año es más complicado encontrar unas instalaciones adecuadas para llevarla a cabo. «Lo importante es que todas las zonas de Vizcaya se sientan implicadas en el evento, y por eso cada vez lo celebramos en un municipio distinto. Esto conlleva mucho esfuerzo, porque no todos disponen de un recinto adecuado. Para nosotros Artunduaga tiene muy buenas características, pero no ha podido ser», añadió Irigoien. La fiesta, no obstante, dejó un buen sabor de boca a los asistentes. Por la tarde, el parque Bizkotzalde acogió una multitudinaria romería en la que todos pudieron bailar.